Polémica por propuesta del Gobierno para modificar reporte de reservas de petróleo y gas
Algunos expertos creen que por esta vía se va a ‘inflar’ o ‘falsear’ la cantidad de reservas del país; mientras que la ANH se defiende y dice que solo está llevando al país hacia estándares internacionales.
Hay polémica por una propuesta del Gobierno nacional que busca modificar las reglas de juego con las cuales las compañías le reportan al país cuántas reservas de petróleo y gas tenemos.
Para algunos expertos, aquí se busca suavizar las normas lo que podría llevar a inflar o falsear la cifra de reservas y, así, justificar la decisión del Gobierno de no entregar nuevos contratos.
Mientras tanto, la Agencia Nacional de Hidrocarburos niega esas acusaciones y dice que solo está llevando al país al cumplimiento de estándares internacionales.
Estas serían las nuevas condiciones para que las empresas reporten reservas de petróleo y gas
El proyecto de resolución de la ANH busca actualizar la metodología de valoración de recursos y reservas de hidrocarburos del país. Específicamente, se cambian los criterios para que una compañía pueda reportar reservas en un área de evaluación.
Por ejemplo, hoy se pide a las empresas la “Existencia de mercado para toda la producción de hidrocarburos, o por lo menos para las cantidades esperadas de ventas”, mientras que en la nueva versión dice que lo que se necesita es “Una expectativa razonable de que existirá un mercado para las cantidades pronosticadas de venta de la producción requeridas para justificar el desarrollo”.
Blu Radio. Petroleo. Foto: Referencia AFP
La norma actual exige que estén disponibles las instalaciones necesarias de producción y transporte. La nueva norma, dice que esas instalaciones deben estar disponibles “o pueden llegar a estar disponibles”. Hoy en día, se pide que una compañía soporte de “la debida diligencia en los trámites ambientales, sociales y legales que se requieren para dar inicio a la explotación del campo” mientras que la nueva norma, habla de evidencia que existen las aprobaciones “o que existirán próximamente”.
Norma vigente
Propuesta de la ANH
Una evaluación económica donde se evidencia que los proyectos de desarrollo son viables y respaldan la inversión requerida.
Existencia de mercado para toda la producción de hidrocarburos, o por lo menos para las cantidades esperadas de ventas, que justifique el desarrollo.
Evidencia que las instalaciones necesarias de producción y transporte están disponibles.
Se soporta la debida diligencia en los trámites ambientales, sociales y legales que se requieren para dar inicio a la explotación del campo.
La evaluación de la acumulación está técnicamente justificada para definir la comercialidad.
La recuperación comercial no es dependiente de tecnologías en desarrollo.
Evidencia de un plan de desarrollo viable, técnicamente maduro.
Evidencia de asignación financiera que ya fue asegurada o con una alta probabilidad de ser asegurada para implementar el proyecto.
Evidencia que soporte un periodo de tiempo razonable para el desarrollo.
Una evaluación razonable de que los proyectos de desarrollo tendrán retornos económicos positivos y que cumplirán con los criterios definidos de inversión y operación. Esta evaluación se realiza sobre las estimaciones de cantidades pronosticadas de los derechos y el flujo de caja asociado usado para la decisión de inversión.
Una expectativa razonable de que existirá un mercado para las cantidades pronosticadas de venta de la producción requeridas para justificar el desarrollo. También debería existir confianza en que todas las corrientes producidas (por ejemplo, petróleo, gas, agua, CO2) pueden venderse, almacenarse, reinyectarse, o disponerse apropiadamente de otra manera.
Evidencia de que las instalaciones de producción y transporte necesarias están disponibles o pueden llegar a estar disponibles.
Evidencia de que existen las aprobaciones legales, contractuales, ambientales, regulatorias y gubernamentales o que existirán próximamente, junto con la resolución de cualquier asunto social y económico.
Las críticas al Gobierno: Buscan inflar o falsear las cifras
¿Qué implica el cambio? Algunos expertos en regulación para el sector creen que se están suavizando las condiciones para clasificar volúmenes de hidrocarburos descubiertos como reservas.
En el sector de hidrocarburos, no basta con encontrar petróleo y gas, además hay que garantizar que sacarlo del subsuelo va a ser comercial y técnicamente viable. Esa es la diferencia entre los recursos y las reservas. Por ejemplo, un proyecto como Sirius es de una magnitud colosal, sin embargo, hoy en día es parte de los recursos y no de las reservas porque aún no cumple los criterios de la medición.
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“Una vez más, el Gobierno busca falsear el Informe de Recursos y Reservas, esta vez flexibilizando los requisitos existentes para el registro de reservas de parte de las empresas. Seguramente, lo que busca el Ejecutivo es que en el Informe de Reservas del próximo año aparezcan unas mayores reservas a las que realmente tiene el país”, dijo el ex presidente de la ACP, Francisco Lloreda.
Petróleo / Imagen de referencia /
Foto: AFP
El ex ministro de minas, Amylkar acosta tiene una visión similar: “En mi concepto, de lo que se trata es de inflar las cifras, sumando peras con manzanas (reservas probadas + recursos contingentes, posibles, probables y prospectivos), para justificar la decisión tomada a inicios de este Gobierno de descartar la firma de nuevos contratos de exploración y explotación de hidrocarburos. La clave está en la reclasificación de tales conceptos a la hora de reportar el Balance reservas/producción. El mensaje consiste en vender humo, afirmando que con los contratos ya firmados y vigentes nos basta y nos sobra”.
No todos los expertos están en la misma línea. Para el director de derecho mineroenergético de la Universidad Externado, Milton Montoya, sí es una novedad la inclusión de nuevos criterios, pero no necesariamente se van a flexibilizar las condiciones.
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“Lo que hace es que incluye o solicita información adicional a los operadores que de cierta manera puede llegar a ser incierta en su momento. Pues esto supondrá una mayor tarea para los operadores de reunir la información con la posibilidad de que, pues, a medida que cambian las circunstancias y avance el tiempo puedan también ajustarse esas expectativas que se piden ahora como requisitos en la resolución”, dijo Montoya.
De ninguna manera estamos flexibilizando los requisitos: ANH
La Agencia Nacional de Hidrocarburosniega que esta resolución busque relajar las reglas de medición de las reservas de hidrocarburos en el país, y cree que, por si solo, este cambio no va a impactar el reporte del próximo año.
“El objeto de la nueva resolución, lejos de relajar las condiciones regulatorias, y que por sí solas no generan impacto en la valoración y cuantificación de las reservas del país, lo que busca es hacer más detallada, precisa y confiable la información entregada por las operadoras, haciendo que los informes se ajusten cada vez más a las definiciones y criterios técnicos del PRMS (Petroleum Resources Managment System). Esto permite dar cuenta de la mejora continua y la rigurosidad del proceso, facilitando la comparación de las reservas del país con las de otros bajo condiciones y criterios internacionalmente aceptados”, dijo a Blu Radio la ANH.
BLU Radio. Agencia Nacional de Hidrocarburos. Foto ANH
La entidad asegura que la propuesta es parte de un paquete de medidas para el sector y busca actualizar los criterios y mejorar la calidad de la información presentada, que permita identificar, seguir y gestionar los recursos y reservas de forma más eficiente. Su visión es que lo que hará la nueva norma será modernizar los criterios y poner la normativa colombiana “a la altura de los estándares internacionales más robustos y rigurosos en la materia” y específicamente del PRMS.
Las reservas probadas de petróleo de Colombia pasaron de 7.1 años en 2023 a 7.2 años en 2024, mientras que, las de gas, natural cayeron y pasaron de 6.1 años a 5.9 años.
La política oficial de la administración de Gustavo Petro es no adjudicar nuevos contratos de petróleo y gas y, en su lugar, concentrar los esfuerzos en el desarrollo de los contratos que ya existen.