La canciller Rosa Villavicencio confirmó que el encargado de negocios de la Embajada de Colombia en Nicaragua, Óscar Muñoz, enfrenta un proceso disciplinario tras haber solicitado la renovación de residencia en ese país para Carlos Ramón González, vinculado al escándalo de corrupción de la UNGRD y recientemente beneficiado con asilo político por el régimen de Daniel Ortega.
“Desde la Cancillería y el Ministerio de Justicia, a través de la Fiscalía, se solicitó la extradición del señor Ramón González. El Gobierno nicaragüense le ha concedido asilo. Existe un protocolo de extradición y lo que hemos manifestado es nuestro desacuerdo con esa decisión. En ese punto estamos. El encargado de negocios está en un proceso disciplinario, hay una investigación de la Procuraduría y estamos aportando toda la documentación que esta entidad está solicitando”, afirmó Villavicencio.
González fue pedido en extradición por Colombia, pero la solicitud fue rechazada luego de que Nicaragua le otorgara asilo. Según el Ministerio de Relaciones Exteriores de ese país, la decisión se fundamentó en presunta persecución política debido a la cercanía del exfuncionario con el presidente Gustavo Petro. González fue militante del M-19, exdirector del Dapre y de la Dirección Nacional de Inteligencia.
La canciller también se refirió a la ausencia de la firma de un nuevo contrato con Thomas Greg para asegurar la expedición de pasaportes hasta abril del próximo año. Aunque evitó dar más detalles, aseguró que hay suficiente stock de documentos y que su entrega está garantizada.