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Encuentran cuerpo que sería de Carmenza Castañeda, secuestrada hace 21 años por las Farc

Los familiares de los esposos Carmenza Castañeda y Gerardo Angulo, ambos secuestrados en el año 2000, los han buscado durante 21 años.

Carmenza Castañeda y Gerardo Angulo.jpeg
Carmenza Castañeda y Gerardo Angulo.
Archivo particular.

El 19 de abril del 2000, en La Calera, Cundinamarca, Gerardo Angulo y Carmenza Castañeda fueron secuestrados por un grupo criminal que vendía a las víctimas a un comando del Frente 53 de las FARC, dirigido en ese entonces por alias Romaña.

Acompañados de la familia Angulo, la Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas, el Equipo Colombiano Interdisciplinario de Trabajo Forense y Asistencia Psicosocial, y la Comisión Colombiana de Juristas, se recuperó un cuerpo en zona rural de San Juanito, Meta, que podría pertenecer a uno de los esposos Angulo Castañeda, desaparecidos hace 21 años.

Para Helmuth Angulo, hijo de las víctimas, quien había recorrido la zona en diez oportunidades en busca de noticias de sus padres, el hallazgo del cuerpo que podría corresponder al de su mamá le deja sentimientos encontrados.

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“Felicidad no tengo, pero sí algo de tranquilidad y paz. Esto de haber encontrado el posible cuerpo de mi madre me da mucha paz, mucha tranquilidad porque ha sido un esfuerzo de familia, los seis hermanos hemos estado durante 21 años buscándolos y encontrar a mi madre es una satisfacción muy grande”, añadió Helmuth Angulo.

Durante 14 días, Helmuth y Nicolás Angulo, hijo y nieto de los esposos Angulo y miembros de la comunidad de San Juanito, trabajaron junto con el equipo interdisciplinario de la Unidad de Búsqueda en 22 cuadrantes que conformaban un área aproximada de 9.200 metros cuadrados.

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“El hallazgo del cuerpo se logró en una zona boscosa bastante compleja, sobre los 2.000 metros, con un clima de lluvia y neblina permanente, por lo que el apoyo de la comunidad fue muy importante para el traslado de los equipos técnicos y humanos, el despeje de la vegetación de la zona y la apertura de alrededor de 1.300 pozos de sondeo en la tierra”, afirmó Luz Marina Monzón Cifuentes, directora de la Unidad de Búsqueda.

El cuerpo recuperado fue entregado al Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses para su análisis e identificación.

La Unidad de Búsqueda continuará el trabajo en esta área localizada sobre los 2.000 metros de altura para ubicar los cuerpos de personas desaparecidas durante el conflicto armado.

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