El coronel retirado del Ejército de los Estados Unidos y especialista en seguridad internacional por la Universidad de Columbia, Eric Rojo, ofreció una visión detallada sobre el despliegue de tropas estadounidenses en el mar Caribe ordenado porel presidente Donald Trump.
Según Rojo, esta operación no representa una preparación para la invasión de Venezuela, sino una estrategia de presión política y militar contra el régimen de Nicolás Maduro y las redes del narcotráfico que operan en la región.
“El propósito es ponerle presión a Maduro, a Petro y a todos aquellos que están participando en la producción y transporte de drogas que son nocivas, no solo para Estados Unidos, sino para el mundo entero”, afirmó el coronel.
Rojo aseguró que el despliegue naval responde al interés estadounidense por controlar las rutas del narcotráfico que, según él, vinculan a Venezuela con los carteles mexicanos y con redes internacionales que involucran incluso a China.
El exoficial fue enfático al señalar que Maduro “es un presidente ilegal, un dictador”, sostenido únicamente por gobiernos como los de Cuba y México. “El pueblo venezolano se va a cansar de este circo y de la falta de todo lo que sufre. Maduro no tiene la capacidad de enfrentarse a Estados Unidos ni nosotros lo vamos a atacar a él”, puntualizó.
Consultado sobre si el despliegue podría derivar en una acción militar directa, Rojo explicó que “esta es una estrategia política que puede resultar en una estrategia militar”, recordando el caso del general Manuel Noriega en Panamá en 1989. Según el coronel, una eventual intervención solo ocurriría si el régimen venezolano comete un acto de agresión contra fuerzas estadounidenses, como el ataque a un avión o una nave.
Respecto al alcance del poder naval estadounidense, Rojo aclaró que los portaaviones desplegados “no son fuerzas de invasión”, sino de control y disuasión. “Los marines que están ahí son para proteger la flota, no para hacer un asalto frontal a un país”, afirmó, desestimando la posibilidad de una ofensiva inmediata.
En cuanto a la posición de Colombia, el coronel Rojo criticó duramente al presidente Gustavo Petro, a quien vinculó retóricamente con el incremento de la producción de drogas en la región.
Finalmente, el coronel minimizó el papel de Rusia y China como aliados de Venezuela, argumentando que “Rusia no puede con Ucrania y China no puede con Taiwán”, por lo que considera improbable una confrontación directa con Estados Unidos.
Con un tono contundente, Rojo concluyó que la presencia militar en el Caribe busca “intimidar a quienes se atrevan a seguir transportando drogas” y demostrar que la región es considerada una zona estratégica para la seguridad nacional estadounidense.