La carta de periodista que perdió la vida en Gaza a su hijo de 2 años: "No me olvides jamás"
El número de periodistas asesinados este lunes 25 de agosto en el bombardeo israelí contra el Hospital Nasser, en el sur de Gaza, aumentó a seis.
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Los cadáveres de los cinco periodistas asesinados este lunes en el doble bombardeo israelí contra el Hospital Naser, en el sur de Gaza, fueron trasladados al cementerio por una multitud de palestinos, que piden que Israel deje de asesinar a quienes documentan el genocidio.
"Las cámaras alcanzadas por los misiles israelíes no se apagarán, y los chalecos de la Defensa Civil no dejarán de brillar", dijo a EFE uno de los periodistas que participó en la comitiva fúnebre.
Los cuerpos fueron llevados en camillas desde el hospital Naser. Junto a ellos, descansaban sus chalecos de prensa y las cámaras: algunas intactas, otras marcadas por la sangre y el polvo y otras destrozadas tras el ataque.
En total murieron en el ataque 20 personas, incluidas un rescatista, tres trabajadores del hospital y un estudiante de último año de Medicina, de acuerdo con testigos y fuentes locales.
Los nombres de lo asesinados son: Hossam Al Masri (camarógrafo de la agencia de noticias Reuters), Mohamed Salama (camarógrafo de la cadena catarí Al Jazeera), Mariam Abu Daqqa (colaboraba con la agencia estadounidense AP), Moaz Abu Taha (freelance) y Ahmed Abu Aziz (periodista para la Red Quds Feed y otros).
Dima Khatib, directora ejecutiva de AJ+, en Noticias Caracol, reveló que la periodista Mariam Abu Daqqa dejó una desgarradora carta a su hijo, donde narra su vida en dicho territorio.
La carta dice: "Querido. Mi corazón, mi alma. Quiero que reces por mí, no quiero que llores. Quiero que me hagas orgullosa, que seas buen estudiante, que seas un empresario. Quiero, mi hijo, que no me olvides jamás. Yo hice todo para ti. Yo hice todo para que tú estés bien. Y cuando seas grande y te cases y tengas una hija, quiero que le des mi nombre, Mariam".
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Durante la emotiva despedida, decenas de personas, al paso del cortejo fúnebre, lloraban, rezaban y gritaban consignas por una Gaza que afronta más de 22 meses de ataques y destrucción. "Queremos ser libres" o "llora por aquel que se ha separado de sus padres, por aquel que se ha separado de sus seres queridos", coreaban los presentes