El precandidato presidencial Miguel Uribe Londoño marcó distancia del pacto interno firmado por otros aspirantes de la colectividad y reiteró sus dudas sobre la transparencia del proceso, que llevaron a la encuestadora Atlas Internacional a retirarse. En diálogo con Mañanas Blu, Uribe Londoño insistió en su propuesta de un mecanismo "limpio" y negó haber buscado contratar a la firma brasileña.
La tormenta por la encuesta interna
La controversia en el Centro Democrático sobre el método para definir su candidato presidencial escaló esta semana. La polémica se centra en la elección de la firma brasileña Atlas Internacional, la cual generó profundas "desconfianzas" en el precandidato Miguel Uribe Londoño.
Sus cuestionamientos públicos sobre la metodología digital de la firma y la falta de garantías en el proceso llevaron a que Atlas Internacional anunciara su retiro, dejando al partido en la necesidad de buscar un nuevo mecanismo para seleccionar a su representante.
Uribe Londoño defendió su postura, asegurando que no busca generar conflictos, sino garantizar la legitimidad del resultado en la contienda en la que también participan María Fernanda Cabal, Paloma Valencia, Paola Holguín y Andrés Guerra.
“Quiero mecanismos transparentes y limpios”
El precandidato fue enfático en que su objetivo es asegurar que la medición de la intención de voto sea confiable y auditable: “He propuesto que se mida la intención de voto por medio de mecanismos que sean transparentes, técnicos y limpios”.
Explicó que su propuesta difiere de la metodología de Atlas, que según él trabaja "solamente digitalmente" y no mide la intención de voto real. En contraste, Uribe Londoño pide un consenso basado en métodos tradicionales: “He propuesto varias encuestas, dos o tres, con condiciones iguales y luego se ponderan. Y con el sentido común, cada encuesta debe ser presencial, en hogares, auditable, publicable y que se cumpla con las leyes vigentes en Colombia”.
Dudas sobre Atlas y supuestos sesgos
Aunque Uribe Londoño evitó acusar directamente a la campaña de María Fernanda Cabal, quien, según él, "lleva muchos meses diciendo que esa es la que ella quiere", sí cuestionó la idoneidad de la firma brasileña.
“¿Por qué [me genera dudas]? Porque sus encuestas no son auditables... si no son auditables, pues ese encuestador no puede hacer la encuesta aquí en Colombia”.Asimismo, respondió a la carta del director del partido, Gabriel Vallejo, quien insinuó que la campaña de Uribe Londoño habría intentado contratar a Atlas Intel.
“No es cierto que alguien de nuestra campaña intentara contratar a la firma Atlas Intel... Mis asesores han tenido conversaciones con esas y otras empresas encuestadoras. porque lo hacen habitualmente porque es su profesión”.
El acta que Uribe Londoño no firmó
El punto central de su desacuerdo radica en el documento de reglas internas que pactaron los demás precandidatos, el cual incluye una cláusula que permite al expresidente Álvaro Uribe influir en la selección final. Uribe Londoño fue tajante al desmarcarse de dicho acuerdo.
Primero, yo no aprobé esa acta. Esa acta la aprobaron ellos cuatro solos
puntualizó.
Aclaró que "ellos cuatro" son María Fernanda Cabal, Paloma Valencia, Paola Holguín y Andrés Guerra, quienes firmaron el 22 de agosto en una reunión en la que él no participó.
Divisiones y confianza en Uribe
El retiro de Atlas Internacional evidencia las fracturas internas en el Centro Democrático para encontrar un consenso. Mientras Miguel Uribe Londoño pide encuestas presenciales y auditables, el resto de los precandidatos había avalado un mecanismo que él consideró "no viable".
A pesar de no haber aprobado el acta que da poderes especiales al expresidente Álvaro Uribe en la selección, Uribe Londoño aseguró que acatará la decisión final del líder del partido: “Yo me atengo a la decisión que tome el presidente Álvaro Uribe Vélez. porque yo en él confío plenamente”. Finalmente, reiteró que su único objetivo es la precandidatura presidencial, confirmando que ha rechazado ofrecimientos para encabezar la lista al Senado.