En una entrevista en Sala de Prensa, el senador Ariel Ávila ofreció una radiografía detallada del panorama político colombiano de cara a las elecciones de 2026. Con su característico tono analítico, el congresista advirtió que el país atraviesa una de las coyunturas electorales más inciertas de los últimos años y que la contienda presidencial será “una carrera a cuatro vueltas”.
Ávila explicó que la primera vuelta ya empezó con las consultas internas de las fuerzas políticas. “La primera vuelta fue lo que ocurrió la semana pasada en el Pacto Histórico y lo que ocurrirá en los próximos días en el Centro Democrático. La segunda es marzo, la tercera es mayo —la primera vuelta reglamentaria— y la cuarta será junio”, afirmó.
Según el senador, aunque el Pacto Histórico logró un resultado “positivo” con casi tres millones de votos, “eso no asegura ni el paso a la primera vuelta presidencial ni el éxito en la consulta del Frente Amplio”. Para Ávila, el gran desafío de la izquierda es lograr una consulta con “cinco o seis millones de votos” si quiere competir realmente en las presidenciales.
El congresista también advirtió que el centro político atraviesa su mayor reto: la dispersión de candidaturas. “Si el centro se fragmenta entre Luna, Galán, Fajardo, Cárdenas o Claudia López, eso terminará mal y el país volverá a escoger entre izquierda y derecha”, advirtió, resaltando la necesidad de una consulta unificada que les permita entrar con fuerza en la contienda.
Sobre la derecha, Ávila señaló que el Centro Democrático definirá pronto su candidato, pero que también deberá participar en una consulta amplia para mantenerse competitivo. “Si en la izquierda gana el ala más radical y en la derecha también, el país se va a escurrir hacia el centro”, sentenció.
El senador también analizó la posible aparición de nuevos nombres en el escenario, entre ellos Juan Carlos Pinzón y Roy Barreras. De este último dijo: “Roy es un malabarista político, suena en todas partes, pero no está marcando en las encuestas. Tiene que comenzar a hacerlo y superar el umbral del Congreso; de lo contrario, podría correr la misma suerte que Fajardo en 2010”.
En cuanto a los temas que definirán el voto ciudadano, Ávila fue claro: “La seguridad seguirá siendo central, pero el tema que más preocupa hoy a los colombianos es la salud. También se va a meter con fuerza el asunto de Venezuela y la relación con Estados Unidos”.
Finalmente, el senador se refirió al presidente Gustavo Petro, de quien considera que continuará en una línea de confrontación: “No veo al presidente conciliando ni bajando el tono. Lo que viene es un proceso de radicalización, similar al que tuvo cuando fue alcalde de Bogotá”.
Concluyó que Colombia se encamina a unas elecciones altamente polarizadas, pero con un espacio abierto para una opción de consenso. “El escenario está en construcción. Nadie tiene asegurada la segunda vuelta”, enfatizó.