Las autoridades en Antioquia están preocupadas porque, dicen, es notable el fortalecimiento de las estructuras criminales en el departamento. Advierten que el Clan del Golfo y las disidencias de las Farc han crecido más de un 50 %.
El ataque al helicóptero en Amalfi, donde murieron 13 policías, los hostigamientos recientes en los que asesinaron a un soldado, las minas antipersonal y la instalación de cilindros bomba son muestra de la violencia desbordada en Antioquia, la cual ha sido posible, advierte la Gobernación, gracias al fortalecimiento de grupos al margen de la ley.
“En los últimos tres años, las disidencias de las Farc han crecido un 70 % y el Clan del Golfo un 60 %. Así ellos se disfracen de insurgentes o contrainsurgentes, todo con el único propósito de captar las rentas del narcotráfico y la minería ilegal”, aseguró el gobernador de Antioquia, Andrés Julián Rendón.
El Observatorio de Derechos Humanos y Paz, IPC, reveló que el crecimiento de las disidencias, principalmente, se ha dado en zonas como el Norte, el Bajo Cauca y el Nordeste de Antioquia.
“Han logrado expandirse a partir del reclutamiento forzado en áreas como el Norte, el Nordeste y el Bajo Cauca antioqueño, que tiene un corredor de movilidad entre los frentes 18 y 36, prácticamente que les permite llegar desde Ituango hasta la serranía de San Lucas”, explicó Carlos Zapata, director del IPC.
Sobre quiénes están detrás del crecimiento de esas estructuras criminales, el gobernador Rendón dijo: “Reiteramos hasta 500 millones de pesos por alias Matías, criminal del ELN; reiteramos la recompensa de 200 millones de pesos por alias Ramiro, de las disidencias de las Farc del frente 18; y por alias 'Macho' y alias 'Primo Gay', que tanto daño han ocasionado en Antioquia, se ofrece 100 millones”.
“Esperamos que, a partir de la firma de los acuerdos de La Habana, el Estado llegara con presencia civil y militar a esos territorios, pero es claro que no pudo hacerlo. No lo pudieron hacer frente a las Farc, no lo pueden hacer ahora. Son los mismos territorios que las Farc dejaron y eso nos genera unas inquietudes sobre los problemas estructurales que tiene el Estado”, agregó, por su parte, Carlos Zapata.
Aparte de la expansión de las disidencias de las Farc y el Clan del Golfo, el IPC ve con preocupación que en zonas como el Oriente, el Suroeste y en el Nordeste cercano estén tomando fuerza grupos criminales organizados como ‘el Mesa’, ‘Pachely’, ‘la Terraza’ y ‘los Triana’.