Clínicas y hospitales en Antioquia alertaron este jueves que las EPS, la Adres, entidades responsables del SOAT, entre otras, ya acumulan una millonaria deuda que pone en riesgo servicios de salud importantes para diferentes usuarios.
Por un lado, 19 clínicas y hospitales, como la clínica CES, Cardio Vid, Las Vegas y la Clínica Medellín, advirtieron que mes a mes no logran cumplir con las obligaciones financieras. Los servicios estarían en riesgo si no se logra poner a punto la cancelación de la deuda, que afectaría la capacidad instalada que incluye 640 camas de UCI y 422 camas de unidad de cuidados especiales.
“Con cifras al 31 de enero del año 2025 la cartera, las cuentas por cobrar de estas 19 instituciones es 2 billones 344 mil millones de pesos. Un crecimiento desbordado de la cartera ha venido creciendo enormemente, recordaba la cifra de este mismo grupo que hace 10 años 1.2 billones de pesos. La población ha crecido también”, expuso a su turno Mauricio Tamayo, presidente del Hospital San Vicente Fundación.
"Hay un riesgo inminente de empezar a cerrar servicios porque el oxígeno financiero se acabó. En los servicios de alta dependencia como las unidades de cuidados intensivos, todos los servicios que prestamos de alta complejidad están en riesgo, porque sin recursos es imposible pagar a proveedores, empleados, las nóminas y operar en esas condiciones es imposible", explicó a su turno Andrés Trujillo, director de la clínica CES.
Hospitales públicos, también en crisis
A ello se suman los 126 hospitales públicos de Antioquia, a los que se les sigue incrementando la deuda y a la fecha es de 1.5 billones de pesos. El director de AESA, Luis Hernán Sánchez, lamentó la situación indicando que hoy en día es un 30% más alta dicha cartera, cuando en general aumentaba en solo 5 y 10 por ciento por periodo.
"En los 126 hospitales públicos de Antioquia tenemos las mismas dificultades que han planteado los compañeros de las clínicas privadas, a nosotros tampoco nos fluyen los recursos financieros y de igual manera las deudas han incrementado muchísimo porque a cierre de 31 de diciembre del 2023 la deuda era de 1.1 billones y ahora es de 1.5 billones", detalló Sánchez.
Según los directivos, los más afectados por este panorama financiero son los pacientes neonatales, pediátricos y adultos mayores con enfermedades crónicas, cardiovasculares, oncológicas, renales, respiratorias, entre otras.