Acemi advierte que la UPC subestimada dejó una deuda de hasta $33 billones
La Corte Constitucional ordenó revisar el cálculo de la Unidad de Pago por Capitación. Acemi presentó un análisis que revela fallas en la información e insuficiencia de recursos.
La Asociación Colombiana de Empresas de Medicina Integral (Acemi) presentó ante la mesa técnica convocada por el Ministerio de Salud, en cumplimiento de órdenes de la Corte Constitucional, un análisis sobre el cálculo de la Unidad de Pago por Capitación (UPC), evidenciando un panorama crítico de desfinanciamiento en el sistema de salud.
Según los estudios, entre 2021 y 2024 se rechazaron costos por 13,4 billones de pesos debido a fallas en la depuración y validación de la información, lo que llevó a una subestimación del valor de la UPC. Esta situación ha derivado en un incremento de la siniestralidad, que pasó de 100,8 % en 2021 a 109,5 % en 2024, y en una deuda actuarial de la Nación que oscila entre 26,4 y 33,4 billones de pesos.
El informe de Acemi advierte que la insuficiencia de recursos ha deteriorado el patrimonio de las EPS, incrementado las deudas con prestadores y proveedores, y generado dificultades para cumplir los requisitos financieros exigidos por la regulación. Además, cuestiona que el Ministerio de Salud haya negado el acceso a la base de suficiencia para replicar cálculos, lo que limita la transparencia y la validación independiente de las cifras.
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Foto: Twitter @acemi_gremio
Otro punto crítico señalado es la financiación insuficiente de las nuevas tecnologías y medicamentos incorporados en 2022 y 2023. Solo en el último año se evidenció un faltante superior a 511.000 millones de pesos para cubrir estos tratamientos.
Acemi también mostró que el uso de servicios de salud ha crecido de forma sostenida: en 2019 se registraron 434,7 millones de atenciones y en 2024 la cifra ascendió a 548,6 millones, impulsada por el envejecimiento de la población y la expansión del plan de beneficios. Enfermedades como el cáncer, la diabetes y la enfermedad renal crónica muestran incrementos significativos en el número de pacientes diagnosticados.
Las conclusiones presentadas insisten en que todos los actores del sistema deben participar en la depuración de la información y en que el Gobierno debe garantizar mecanismos de cruce y contraste de datos. “Detrás de cada cifra hay miles de colombianos que esperan tratamientos, medicamentos y atención”, enfatizó el gremio, al advertir que la falta de ajuste financiero no puede recaer sobre los pacientes.