En medio de un doloroso diagnóstico de sarcoma de Kaposi a principios de diciembre de 2023, Juan Gabriel Villada ha enfrentado una batalla aún más difícil contra la negligencia administrativa que amenaza con privarlo de su derecho fundamental a la salud.
Villada, residente de Medellín, fue admitido de urgencia en la unidad de cuidados intensivos del Hospital Fundación San Vicente de Paul, donde luchó por su vida durante diez días. Tras su alta, recibió la prescripción vital de quimioterapia para combatir la enfermedad, solo para encontrarse con un bloqueo inesperado: su EPS
, Nueva EPS, lo había dado de baja por una supuesta mora en pagos. Sin embargo, cuando él fue a preguntar para su sorpresa el hospital, en un increíble error administrativo, lo registró como fallecido ante la Registraduría Nacional, negándole así el acceso al sistema de salud y obligándolo si o si a costear su tratamiento de manera privada.
Desesperado por una solución, Villada recurrió a las tutelas, obteniendo un fallo judicial a su favor que ordenaba a Nueva EPS
restablecer su afiliación y proporcionarle el tratamiento médico necesario. A pesar de la orden judicial, han transcurrido cinco meses y la EPS no ha cumplido con la sentencia, dejando a Villada en un limbo legal y médico devastador.
Las consecuencias de esta situación han sido desgarradoras para Villada, pues ha gastado más de 70 millones de pesos de sus propios recursos en su tratamiento, se ha visto obligado a vender pertenencias personales y, cruelmente, ha perdido la propiedad de un apartamento debido a la confusión generada por su estado civil registrado.
Nueva EPS, por su parte, reconoció las dificultades en el manejo de este caso específico, prometiendo activar inmediatamente a Villada para asegurar la continuidad de su tratamiento, quien nuevamente fue activado al sistema hasta el pasado 19 de junio del presente año