“El síndrome del villancico se refiere a una situación en la cual remembramos y recordamos todo lo que hicimos y no hicimos durante el año”, explicó la experta (Lea también: El almanaque de Bristol: una tradición colombiana de casi 200 años).
Según manifestó, ese sentimiento de tristeza se transforma en nostalgia y es el 31 de diciembre de cada año cuando florecen los sentimientos encontrados, pues siente que es el momento para llorar sin que quienes lo rodean se preocupen.
“Es un brindis con lágrimas y sonrisas”, añadió (Lea también: Google presenta animación navideña interactiva en 360 grados).
Por tal motivo, hizo un llamado a ponerle cuidado a estas ganas de llorar “porque a veces el llorar no solo dice que estamos haciendo balance sino que también estamos tomando nuevas decisiones” y a eso es lo que le estamos llamando ‘síndrome del villancico’.