Escándalo en Miss Universo: jurado renunció y acusó a Miss México de ser “ganadora falsa”
A pesar de la solidaridad que despertó tras la polémica, especialistas en concursos de belleza apuntaban a otras candidatas.
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La coronación de la mexicana Fátima Bosch como Miss Universo 2025, realizada en Tailandia, quedó opacada por una oleada de cuestionamientos que ya se ha convertido en uno de los mayores escándalos recientes del certamen. La joven de 25 años obtuvo la corona en medio de aplausos, pero también de abucheos y acusaciones de un presunto fraude en su elección.
Bosch, visiblemente emocionada tras recibir el título, aseguró que su propósito durante el reinado será promover la igualdad de género y servir de inspiración para las mujeres jóvenes. “Esta corona no representa solo belleza. Es una oportunidad para generar impacto”, afirmó durante su primera intervención como Miss Universo.
La mexicana no llegó al concurso como favorita. Su nombre comenzó a resonar desde inicios de noviembre, cuando protagonizó un tenso intercambio con Nawat Itsaragrisil, jefe del comité organizador local. El incidente, transmitido en directo, mostró a la candidata exigiendo respeto y negándose a guardar silencio, lo que generó una oleada de apoyo en redes sociales.
A pesar de la solidaridad que despertó, especialistas en concursos de belleza apuntaban a otras candidatas, como Tailandia, Costa de Marfil o Filipinas, como las principales contendientes. La victoria de Bosch, recibida con sorpresa por parte del público en Bangkok, no tardó en convertirse en un foco de controversia.
El enfrentamiento viral entre Bosch y Nawat desencadenó un conflicto interno inesperado. El presidente de la Organización Miss Universo (MUO), el mexicano Raúl Rocha, intervino para respaldar a la concursante y advirtió que evaluaba acciones legales contra el empresario tailandés.
Tras dos semanas de tensión, ambos dirigentes anunciaron haber superado sus diferencias. Sin embargo, no se aclaró si las advertencias legales quedan o no sin efecto.
Cuando el pianista franco-libanés Omar Harfouch anunció públicamente su renuncia como miembro del jurado la controversia comenzó. Aseguró que el proceso de selección careció de transparencia y que las 30 semifinalistas habrían sido elegidas mediante una “votación secreta” sin participación real del panel evaluador.
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Harfouch fue más allá: insinuó que la elección de Bosch estuvo influida por supuestos vínculos comerciales entre el presidente de MUO y el padre de la nueva reina, Bernardo Bosch, empresario vinculado a la estatal Pemex. Aunque no presentó pruebas, advirtió que emprenderá acciones legales por presuntos delitos que incluyen abuso de poder, corrupción y engaño contractual.
A través de Instagram, calificó a Bosch como “una Miss Universo de mentira” y afirmó haber grabado una entrevista, 24 horas antes de la final, anticipando que México obtendría la corona. Según su versión, ese material será difundido por HBO en un reportaje sobre las “irregularidades” del certamen.
El desconcierto aumentó cuando otros dos miembros del jurado tampoco asistieron a la gala: el exfutbolista francés Claude Makélélé, quien anunció que no volverá a participar en Miss Universo, y el escultor brasileño Romero Britto, cuya ausencia no ha sido explicada.
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Pese a la gravedad de las acusaciones, la MUO no ha respondido a los señalamientos de fraude. Durante la primera rueda de prensa como Miss Universo, los organizadores impidieron que los periodistas formularan preguntas sobre la polémica, tras solicitar previamente que las preguntas fueran enviadas por escrito.
Páginas especializadas en concursos, como Real Pageanthology, afirmaron que el resultado marca un punto de quiebre para la credibilidad de Miss Universo y acusan a la organización de “elegir a la ganadora sin importar nada más”. El comentario desató un intenso debate en redes sociales, donde miles de usuarios han expresado rechazo hacia el resultado final.