El padre Rafael de Brigard dedicó su reflexión dominical a la generosidad y la confianza en Dios, inspirándose en la historia de la viuda que ofrenda sus últimas monedas en el templo.
Citando el Evangelio de San Marcos, el padre destacó la enseñanza de Jesús al observar que la viuda "ha echado todo lo que tenía para vivir," resaltando así su absoluta confianza en la providencia divina.
En su mensaje, de Brigard invitó a la comunidad a reflexionar sobre el papel de los pobres en el corazón de Dios. Recordó que, tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento, los pobres tienen un lugar especial en el plan divino. “Dios sustenta al huérfano y a la viuda,” citó del Salmo 145, alentando a los oyentes a ver en los más necesitados una oportunidad de practicar el amor y la compasión, afirmando que “cuando ante nosotros hay una persona necesitada, es Cristo quien se hace presente”.
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