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Bajo el agua amanecieron pupitres, escritorios y materiales pedagógicos en la Institución Educativa Brisas del Río como consecuencia del fuerte aguacero que por más de dos horas cayó en Barranquilla y que inundó salones de clases, pasillos e, inclusive, destrozó el comedor que recientemente había sido remodelado tras sufrir afectaciones durante el invierno de 2022.
El colegio cuenta con más de 800 estudiantes, que van de transición a once grado, y todos de alguna manera han visto alterada su jornada académica, ya que a los más pequeños les tocó recibir sus clases en los andenes del patio y los de bachillerato hasta tuvieron que barrer y trapear para escurrir el agua de los salones y poder hacer sus actividades.
La profesora Marbel Trejo afirma que, pese a las intervenciones que allí ha hecho el Distrito en materia de infraestructura, se repitió la historia del año pasado, cuando el invierno causó estragos en el plantel.
"Esta vez se vino un pedazo gigante del techo, ahora son más salones los inundados, porque la vez pasada solo se inundaron los del primer piso, pero ahora también se anegaron los del segundo piso y otros pasillos. El comedor volvió estar en la peor condición que pudiéramos imaginarnos y esta situación nos tiene bastante preocupados", dijo la docente del Área de Humanidades.
Así, la comunidad educativa pide una nueva intervención de la Secretaría de Educación del Distrito, toda vez que las obras realizadas no habrían sido suficientes para subsanar las fallas de infraestructura y existe riesgo de que el techo siga colapsando en pasillos y aulas de clases.
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