“En la reunión con los parlamentarios y el gobernador, les comenté que el equipo no era más en la ciudad, porque es penoso ir 90 o 100 personas a ver al equipo. No hay un compromiso del dueño de la ciudad. Y si no hay esa entrega por parte del mayor accionista, entonces para qué vamos a seguir con esa burla en la ciudad. Y la decisión mía, con el apoyo de los concejales, de los diputados y del gobernador, es que el Cúcuta no merece que juegue aquí, porque de verdad que están irrespetando a la ciudad”, declaró Rojas.
El alcalde tuvo una reunión en Bogotá con Jorge Perdomo, presidente Dimayor, un representante de la junta directiva del Cúcuta y con William Laguado, gobernador del departamento para llegar a un acuerdo sobre el futuro del club.
Finalmente, la decisión fue no mantener más al cuadro ‘Motilón’ ya que sus patrocinadores se retiraron y además, el presidente José Augusto Cadena, no mostró mayor compromiso.
Así las cosas, el directivo tendrá que buscarle sede a la escuadra que milita en la segunda división del Fútbol Profesional Colombiano. “La gente no aguanta verlo en la calle y corre peligro. La decisión mía es que se lo lleve y juegue donde él quiera jugar”, apuntó César.