Con nuevo contrato cambia el diseño de pasaportes de Colombia; desde el 1 de abril de 2026

El Gobierno Nacional firmó esta semana un nuevo convenio con la Casa de la Moneda de Portugal que permitirá, a partir del 1 de abril de 2026, la emisión de un pasaporte completamente rediseñado, con mayores estándares de seguridad y un enfoque en soberanía tecnológica. Así lo confirmó en entrevista con Mañanas Blu el jefe del despacho presidencial, Alfredo Saade, quien lideró el proceso de estructuración.“Se firmó para lograr la estructuración y el proceso de transición y el proceso sobre todo de operación en temas de pasaporte y visado”, explicó Saade, subrayando que este acuerdo garantiza la continuidad en la expedición del documento, tras meses de incertidumbre sobre la contratación.¿Cómo será el nuevo diseño de pasaporte colombiano? Tendrá mariposas Uno de los anuncios más llamativos del jefe del gabinete presidencial fue la transformación visual del pasaporte colombiano. Según reveló, el diseño actual —que ha estado vigente por más de una década— será sustituido por uno con un enfoque estético completamente nuevo.“Va a ser mucho más lindo, lo único que le puedo decir […] mariposas, nada más le puedo decir”, comentó Saade en tono reservado, dejando entrever que el nuevo diseño incluirá este símbolo de biodiversidad que evoca la identidad cultural del país.Si bien no se confirmó si el tradicional color vino tinto de la tapa cambiará, sí se espera que tanto el interior del cuadernillo como sus elementos visuales se modernicen y reflejen motivos autóctonos. La presentación oficial del nuevo diseño está prevista antes de finalizar agosto de este año.Soberanía tecnológica y seguridad biométrica fortalecidaMás allá de lo estético, el convenio con Portugal apunta a un salto tecnológico en la emisión del pasaporte colombiano. De acuerdo con Saade, se trata de “fortalecer la soberanía tecnológica de Colombia en la emisión de estos tipos de documentos”. La alianza con la Casa de la Moneda de Portugal permitirá que el país tenga control completo sobre los datos y la infraestructura tecnológica que respalda estos sistemas.Respecto a las especificaciones de seguridad, el funcionario aseguró que “se fortalece aún más y tenga la plena seguridad que seguiremos en el mundo siendo reconocidos por la seguridad de nuestro documento de viaje”. Cabe destacar que el pasaporte colombiano ha sido clave para mantener la exención de visado Schengen en Europa, una medida que depende, en gran parte, de la confiabilidad del documento.Un proceso de transición: último contrato con Thomas Greg & SonsEntre septiembre de 2025 y abril de 2026, Colombia vivirá un periodo de transición. Durante este lapso, la actual unión temporal encabezada por Thomas Greg & Sons seguirá encargada de la producción de los pasaportes bajo un nuevo contrato, el cual será, según confirmó Saade, el último.“Es la última, es la transición. Antes no se hablaba de transición, ahora ya es la transición donde comienza una nueva era con la Casa de la Moneda de Portugal”, indicó. Este nuevo contrato temporal establecerá cláusulas que garanticen la transferencia ordenada de tecnología y datos hacia el nuevo operador.Sobre el mecanismo para formalizar esta extensión, Saade descartó que se trate simplemente de una prórroga: “Yo lo que creo es que se firma un nuevo proceso porque hay unas cláusulas que estaban y que no se pueden repetir”.¿Costará más el nuevo pasaporte?Una de las preocupaciones ciudadanas gira en torno al posible aumento en el costo del documento. El funcionario presidencial fue enfático en señalar que el convenio firmado no implicará un alza significativa.“Se mantienen las cifras adoptadas […] los pasaportes subirán lo normal del IPC, los movimientos normales de la economía”, aclaró, indicando que no habrá sorpresas en el precio.Este acuerdo marca el inicio de lo que el gobierno ha calificado como “una nueva era en temas de pasaporte y visa”. Con un diseño renovado, mejoras tecnológicas y garantías de soberanía en los datos personales, el país se prepara para una transición que no solo moderniza un documento de viaje, sino que refuerza la confianza en los sistemas de identificación nacionales.“Cumplimos, cumplimos, cumplimos —reiteró Saade—, que era el gran temor que se había y que a diario los medios de comunicación decían. El gobierno nacional cumplió”.