Desde lo más profundo del Pacifico Nariñense, el comandante de la Coordinadora Guerrillera del Pacifico de la Segunda Marquetalia, Andrés Allende, dio por primera vez una entrevista a un medio de comunicación para hablar sobre el proyecto de paz total que propone el Gobierno Nacional, liderado por el presidente Gustavo Petro.
Vistiendo una chaqueta blanca y gorra, el jefe de este grupo de disidencias de las Farc manifestó que no se va a esconder más y por eso decidió dar la cara, con el único anhelo de que la paz total que propone Petro sea el proceso definitivo para poner fin a la guerra que se está desarrollando entre combatientes de esta guerrilla; que nunca se acogieron al proceso y decidieron retomar la vía de las armas.
Allende es uno de los hombres más buscados por las autoridades, debido a las evidencias que tienen sobre las toneladas de coca que ha enviado al exterior y por quien se ofrece una millonaria suma de dinero para quien de información que permita su captura.
Pero el jefe rebelde afirmó a Blu Radio que después del acercamiento que hizo con el alto comisionado para la Paz, Danilo Rueda, tomó la decisión de meterse de lleno en el llamado del presidente Petro, para participar en la construcción de una estrategia que permita alcanzar la paz total propuesta por el mandatario de los colombianos.
En dialogo exclusivo con Blu radio el jefe guerrillero dice que "en el pacífico, se vive una guerra que cada vez es más difícil, que pone en riesgo a las comunidades" y reconoce que esta confrontación armada con otros combatientes de las Farc debe parar ya porque es “absurda y en nada está contribuyendo a la paz total”.
Para llegar al campamento de este comandante de la Coordinadora Guerrillera del Pacífico de la Segunda Marquetalia no fue fácil, pues hay que recorrer centenares de kilómetros por veredas, caseríos, ríos y carreteras que han sido construidas por la misma comunidad ante la falta de la presencia del estado.
En esta apartada zona del pacífico nariñense se puede apreciar gigantescas pancartas alusivas a la Segunda Marquetalia con las fotografías de alias 'Iván Márquez', 'Iván Ríos' y 'Manuel Marulanda', entre otros, con lo que quedó evidenciado que el control del área está bajo su jurisdicción.
Rodeado de sus hombres de confianza y los comandantes de los frentes Iván Ríos, Ariel Aldana y la columna móvil Mariscal Sucre, el jefe subversivo habla tranquilo y pausado sobre su situación jurídica. Pero a su vez es cauteloso y vacila en contestar porque está seguro que quiere llegar un acuerdo con el estado colombiano y los otros grupos que hoy tienen una dura confrontación armada.
"Si hay garantías estoy dispuesto a conocer las pruebas que dicen tener en mi contra por el presunto delito de narcotráfico", manifestó Allende, tras ser preguntado por una posible solicitud de extradición.
Después de pagar tres años de cárcel, y de acuerdo con su formación ideológica y su capacidad de mando, Allende se convirtió en uno de los hombres más importantes de las disidencias de las Farc de la Segunda Marquetalia, tras crear el frente Alfonso Cano y unir a viejos contradictores con los frentes Iván Ríos, Mariscal Sucre y Ariel Aldana, para crear la Coordinadora Guerrillera del Pacífico.
Este jefe de las disidencias en Nariño fue firmante del acuerdo de La Habana, en Cuba, y volvió a las armas tras el asesinato de varios de sus compañeros excombatientes. Dice que lejos de querer entregar las armas, está muy seguro de comprometerse con la paz total que propone el presidente Petro.
El comandante subversivo lanza una ambiciosa y audaz propuesta. "Queremos que el Gobierno Nacional nos titule las tierras donde estamos para trabajar y adelantar proyectos productivos y que los hombres que están en armas se conviertan en guardias campesinas".
Es decir, lo que pide Allende es que el gobierno los capacite para evitar que, en una eventual negociación, estas zonas no queden solas; como sucedió con el proceso de las extintas Farc.
Indicó que no puede decir cuántos muertos más faltan para lograr una tregua con las disidencias de alias 'Iván Mordisco' en Nariño, pero advirtió que está dispuesto a un dialogo claro y directo para evitar más muertes de combatientes en el pacífico nariñense. En donde las comunidades se están desplazando y otras se mantienen en confinamiento.
"Esto es muy duro, ver a esas comunidades cómo tienen que dejar sus casas y fincas para poner a salvo sus vidas", insistió.
Aseguró que nada tienen que ver con los grupos paramilitares y muestra de eso es la liberación sanos y salvos y entrega a la Defensoría del Pueblo y Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) de más de 37 personas, entre ellos varios menores de edad, capturados en combates; y otros más que se entregaron voluntariamente.
"A ellos les respetamos la vida como gesto de paz y muestra de que sí queremos sentarnos ya para dialogar. Pedimos del gobierno levantar las órdenes de captura y respaldar esta iniciativa de paz en el pacifico nariñense", puntualizó Allende.
En este sector de Nariño los habitantes poco hablan y cuando lo hacen son puntuales en sus apreciaciones. Casi nunca se refieren a los grupos armados, porque de algo si están seguros es que quieren vivir en paz; por eso le pidieron a Petro agilizar los diálogos con las estructuras armadas ilegales para prevenir nuevas muertes y desplazamientos en la región.
Otras comunidades que habitan en las veredas, caseríos e inspecciones del pacifico manifestaron que con sus propios recursos han construido obras que son responsabilidad del estado como son escuelas y carreteras veredales, entre otras.
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