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Durante más de una hora se reunieron Roy Barreras y Gustavo Petro en la Casa de Nariño para evaluar el estado de la coalición de Gobierno en el Congreso y el futuro de las reformas sociales, especialmente la de la salud. Después del encuentro, el presidente trinó una foto del encuentro y señaló: "Las reformas sociales van".
Lo más importante a tratar en esta reunión fue la reforma a la salud presentada por los Partidos Liberal, Conservador y de la U, la cual llegó a manos del presidente Gustavo Petro este miércoles, 8 de marzo. La conclusión de Roy Barreras es que hay más acuerdos que desacuerdos entre ese texto y la propuesta del Gobierno nacional.
“Hemos revisado con el señor presidente, en dos columnas, aquellas posiciones que son comunes y aquellas en las que hay desacuerdos con el documento que se conoció el día de ayer, son más los acuerdos que los desacuerdos”, manifestó Barreras.
Sin embargo, agregó que el presidente se mantendrá en tres líneas rojas en la reforma: “Las líneas básicas del presidente Petro, que nosotros defendemos, son privilegiar la atención primaria garantizando que la prevención de la enfermedad esté primero para evitar la curación de la enfermedad; garantizar el pago directo para que no haya intermediación de las EPS en los recursos públicos y eliminar la integración vertical”.
Roy Barreras respondió al pedido de Salvatore Mancuso, exjefe paramilitar, el cual solicitó al Gobierno que se permita una negociación con el Clan del Golfo. Dicha misiva también fue enviada al presidente del Congreso.
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“Mi posición es la misma desde el año 2013, cuando presenté el Marco para la Paz que permitió la apertura de las conversaciones con las FARC y se resume en tres fases: la justicia transicional es para las insurgencias; para los paramilitares es justicia y Paz y para los delincuentes comunes es la justicia penal ordinaria. Esas líneas son las únicas que permiten que no se desvirtué y se mezclen en un salpicón con manzanas envenenadas”, señaló Barreras.
“El proceso de la paz total hay una presunción en esa carta que es una especie de denegación del Estado, según la carta, el Estado fracasó completamente en el control del territorio y que como ellos tienen el control del territorio entonces son sujetos políticos. ¡No! Los paramilitares no agenciaron ninguna revolución contra el Estado, sino un proceso de apropiación de tierras y de recursos”, añadió.
Por eso le reclamó a Mancuso que en su carta olvida “una cosa fundamental” y es que el elemento primordial que ha hecho que se rearmé en grupos sucesores de paramilitarismo es el narcotráfico, “no hay ninguna lucha social”.
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“La ley de beneficios que se va a tramitar les dará la oportunidad de reincorporarse a la sociedad y tener ellos mismos una vida tranquila y devolverle a Colombia la posibilidad de una paz total”, concluyó Barreras.
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