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Alirio Gualdrón Rojas, de 59 años, fue hallado culpable del atroz crimen que conmocionó a Girón y al área metropolitana de Bucaramanga hace poco más de un año: el asesinato de una niña de tan solo 8 años. El Juzgado Primero Penal del Circuito Especializado de Bucaramanga aceptó la solicitud de la Fiscalía de imponer la pena máxima contra el responsable, que iría sobre los 42 años en prisión.
El juez tiene previsto oficializar el fallo condenatorio en las próximas horas, considerando la gravedad del caso y el principio de protección reforzada a los menores de edad como sujetos de especial protección constitucional.
“Solicitamos la pena más alta que permite la ley, por el nivel de violencia y la víctima, una menor”, aseguró la Fiscalía.
El crimen ocurrió el 1 de mayo de 2024, cuando la niña desapareció sobre el mediodía del barrio Rincón de Girón, parte baja. En ese momento, la madre había dejado a su hija bajo el cuidado de una vecina. Horas después, tras una angustiosa búsqueda, autoridades de la Sijín, el CTI, el Ejército y los Bomberos localizaron el cuerpo sin vida de la menor en un terreno baldío, a pocos metros de la estación de Metrolínea, cerca del anillo vial.
El caso generó una oleada de indignación y protestas en todo el área metropolitana, reclamando justicia y mayor protección para los niños. La Fiscalía imputó a Gualdrón Rojas los delitos de desaparición forzada y feminicidio agravado.
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