Clínica Sahio seguirá atendiendo pacientes de Nueva EPS hasta que decidan cómo será el traslado
La Clínica Shaio anuncia que dejará de atender a afiliados a Nueva EPS por falta de pagos.
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La Fundación Clínica Shaio, reconocida por la atención de pacientes de alta complejidad en Colombia, anunció que continuará prestando servicios a los usuarios de Nueva EPS de manera transitoria, mientras se define el mecanismo de traslado a otras instituciones. Así lo confirmó el director de la entidad, doctor Gilberto Mejía, en entrevista con Blu Radio, en medio de la crisis generada por las millonarias deudas que esa EPS mantiene con la clínica.
La Clínica Shaio atiende en promedio 14.000 pacientes al mes, de los cuales cerca del 20 % pertenecen a Nueva EPS, es decir, unos 3.000 usuarios.
“Nosotros atendemos alrededor de 14 mil pacientes mensuales y de esos pacientes más o menos el 20,22 % son pacientes de Nueva EPS. Entonces sí es un impacto importante para este tipo de pacientes”, explicó Mejía, quien insistió en que la decisión se tomó de manera preventiva y no como un cierre abrupto.
El directivo fue enfático en señalar que la prioridad seguirá siendo la atención del usuario: “No estamos cerrando ya; seguiremos atendiéndolos hasta que lleguemos a esa fecha y podamos localizarlos en los sitios adecuados para que tengan una atención integral”.
Uno de los puntos más críticos es la deuda que mantiene Nueva EPS con la Fundación Shaio. Según Mejía, la cartera asciende actualmente a 95.000 millones de pesos, de los cuales casi el 50 % corresponde a cuentas con más de un año de vencimiento.
“Esto no es solo de esta administración ni del proceso de intervención, sino que viene desde 2008. La deuda se duplicó después de la intervención del Gobierno, pasando de 50 mil a 95 mil millones de pesos”, detalló.
El director también subrayó que la clínica, a pesar de los impagos, se mantiene financieramente sólida: “No estamos en crisis, pero no podemos seguir sacrificando la caja de la Fundación para atender pacientes muy complejos sin los recursos que nos corresponden”.
La decisión de limitar la atención a futuro de los pacientes de Nueva EPS busca proteger la sostenibilidad de la clínica y evitar un colapso en la prestación de servicios.
“Es una medida de responsabilidad empresarial. Hoy la clínica tiene todos los insumos, paga cumplido a médicos, proveedores y trabajadores, pero si abrimos huecos de caja, en tres o cuatro meses no podremos responder ni siquiera en urgencias”, advirtió Mejía.
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El directivo enfatizó que esta determinación no obedece a presiones políticas ni a maniobras de coyuntura, sino a la necesidad de garantizar la atención segura de todos los pacientes. “Yo no creo que sea una maniobra para un ‘chuchu chu’, sino una realidad del país: los recursos son limitados y deben destinarse de la mejor manera”.
Uno de los aspectos que más preocupa a los usuarios de Nueva EPS es el futuro de sus tratamientos, cirugías y citas programadas. Frente a esto, el director aseguró que la Fundación honrará los compromisos adquiridos.
“Lo que tenemos que tener en cuenta es que en el centro de todo este problema está el paciente. La Fundación no lo va a abandonar ni le va a cancelar ninguna autorización ni ninguna cita que ya tenga programada”, afirmó.
La clínica acompañará el proceso de traslado junto con la EPS y el Gobierno, aunque hasta ahora no se ha dado un contacto formal con la Superintendencia de Salud. “Hemos iniciado conversaciones con la gerencia regional de Nueva EPS para dar instrucciones claras a los pacientes y garantizar que tengan respaldo en la red”, señaló Mejía.
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El caso de la Clínica Shaio refleja una problemática estructural del sistema de salud en Colombia: el incumplimiento en los pagos de las EPS a las clínicas y hospitales, que genera dificultades para la sostenibilidad de las instituciones y pone en riesgo la continuidad del servicio a los pacientes.
Nueva EPS, con más de 11 millones de afiliados, fue intervenida por el Gobierno Nacional en 2024 debido a fallas financieras y administrativas. Desde entonces, las quejas por falta de pago a prestadores se han incrementado.
La situación de la Shaio se suma a las denuncias de otras clínicas y hospitales en distintas regiones, que advierten sobre la imposibilidad de seguir atendiendo a pacientes si no se solucionan los problemas de flujo de recursos.