La Alcaldía de la ciudad de Manizales decidió extender por un mes más la alerta hospitalaria declarada el pasado 21 de julio, debido al colapso en la red de atención médica que enfrentan clínicas y hospitales de la ciudad.
Los centros asistenciales han llegado a reportar ocupaciones por encima del 200 %, lo que ha generado una emergencia sostenida que compromete la atención de la población.
El Hospital Universitario de Caldas, uno de los más afectados, ha tenido que mantener en urgencias a pacientes que requieren hospitalización, debido a la falta de camas disponibles. Los usuarios permanecen allí durante días, recibiendo tratamiento en condiciones críticas.
Según el secretario de Salud municipal, David Gómez Springstube, las horas más complejas se presentan entre la noche y la madrugada, cuando se concentra el mayor número de atenciones.
Dificultades en entrega de medicamentos
El funcionario advirtió que, además del colapso en urgencias, persisten graves dificultades en la entrega de medicamentos, lo que ha obligado a interrumpir tratamientos esenciales y ha incrementado la cantidad de pacientes que deben regresar por complicaciones médicas.
“La situación sigue siendo muy delicada. Necesitamos que la red hospitalaria esté alineada, que el sistema responda y que los ciudadanos hagan un uso responsable de los servicios”, señaló Gómez.