Diversas organizaciones del sector salud divulgaron el Manifiesto del Pacto por una Mejor Salud, un documento en el que expresan su preocupación por la situación del sistema y por el impacto que, consideran, están teniendo narrativas difundidas en redes sociales sobre el funcionamiento de los servicios.
El comunicado sostiene que el país enfrenta una crisis que afecta a pacientes, trabajadores y prestadores, y que requiere una discusión basada en información verificable y no en descripciones que, según los firmantes, dificultan la comprensión del problema.
El comunicado plantea que el debate público ha estado marcado por contenidos que buscan señalar responsables en lugar de analizar las causas del deterioro. Ante este escenario, las organizaciones anuncian la creación de una estrategia de comunicación que recurre a recursos como la sátira, el humor y personajes digitales con el propósito de amplificar información basada en datos y experiencias de usuarios. Según el texto, esta metodología busca captar la atención de la ciudadanía en un entorno de alta polarización y desconfianza generalizada.
Los firmantes afirman que la iniciativa no está dirigida contra sectores políticos específicos, sino orientada a fortalecer el acceso a información verificable. El documento señala que, dada la complejidad del sistema, es necesario ampliar la participación ciudadana, visibilizar la situación de los pacientes y promover un diálogo público que permita explorar soluciones viables.
Entre las acciones previstas se incluye la difusión de contenidos pedagógicos y testimonios que, según el manifiesto, reflejan la operación real de los servicios de salud en el país.
El texto también indica que la intención de dar voz a actores que, de acuerdo con las organizaciones, no han tenido suficiente espacio en la discusión, como asociaciones de usuarios, pacientes con enfermedades de alto costo y entidades prestadoras.
A la vez, plantea que el objetivo central del Pacto es contribuir con elementos informativos que apoyen la toma de decisiones y favorezcan el planteamiento de propuestas que puedan desarrollarse en el corto y mediano plazo.
El manifiesto está respaldado por más de 60 organizaciones, entre ellas asociaciones de usuarios de EPS, colectivos de pacientes, gremios empresariales, instituciones médicas, universidades, sociedades científicas y exministros y exviceministros de Salud.