En una sorprendente mezcla de tecnología, creatividad y viralidad, los jóvenes de la generación Z han adoptado una nueva forma de interactuar con sus iPhones: usando la lengua. La función, incluida en la reciente actualización del sistema operativo iOS 26 de Apple, ha desencadenado una auténtica tendencia en redes sociales, especialmente en TikTok, donde abundan los videos de usuarios controlando sus dispositivos sin siquiera tocar la pantalla.
Desde su lanzamiento a principios de junio, iOS 26 ha sido promocionado por Apple como una evolución significativa en la experiencia de usuario. El nuevo sistema operativo, según el gigante de Cupertino, incorpora un diseño más atractivo, herramientas inteligentes potenciadas por inteligencia artificial y mejoras funcionales en diversas aplicaciones. Sin embargo, lo que realmente ha capturado la atención del público más joven no son las nuevas apps, sino la posibilidad de controlar el teléfono mediante expresiones faciales.
Lo que comenzó como una opción pensada principalmente para mejorar la accesibilidad de personas con movilidad reducida, ha sido reinterpretado por los usuarios más jóvenes como una herramienta lúdica y creativa. En países asiáticos, especialmente en Corea del Sur y Japón, se ha popularizado el uso de gestos con la lengua o los labios para ejecutar acciones como tomar capturas de pantalla, abrir aplicaciones o dar 'me gusta' en redes sociales.
“Esta nueva función se está volviendo viral en Internet”, comentan múltiples medios especializados, y basta con dar un vistazo rápido en TikTok para comprobarlo. Videos donde adolescentes activan comandos con solo sacar la lengua o mover los labios abundan en la plataforma, acumulando millones de visualizaciones.
Los pasos para activar esta función no requieren conocimientos técnicos complejos. Primero, se debe acceder a la sección de ‘Configuración’, luego dirigirse a ‘Accesibilidad’, continuar con ‘Seguimiento de la cabeza’ y, finalmente, seleccionar los gestos faciales que se desea utilizar. Una vez configurado, el sistema puede reconocer movimientos específicos del rostro y traducirlos en comandos táctiles, como deslizamientos, toques o accesos directos.
Aunque para algunos puede parecer una excentricidad más de la generación Z, expertos en accesibilidad destacan el valor de esta tecnología. La capacidad de operar un dispositivo sin necesidad de usar las manos representa un gran avance para personas con discapacidades motoras, demostrando cómo la inclusión puede ir de la mano con la innovación y la viralidad.
El fenómeno no solo ha capturado la atención del público joven, sino también la de desarrolladores y creadores de contenido que ahora exploran nuevas formas de interacción entre el ser humano y la tecnología móvil. En una era donde la personalización y la experiencia de usuario son clave, gestos tan simples como un movimiento de lengua podrían marcar el futuro del control digital.
Con esta función, Apple no solo redefine la manera en que usamos nuestros dispositivos, sino que también demuestra que incluso los movimientos más pequeños pueden generar un gran impacto en la forma en que nos conectamos con el mundo.