Una de las calles del casco urbano de Zaragoza, Bajo Cauca de Antioquia , se convirtió en una mina de oro improvisada después de que la destaparan para unos trabajos de alcantarillado.
La fiebre del oro se tomó la calle Bolívar en Zaragoza. Habitantes del casco urbano se agolparon sobre la vía que normalmente está dedicada al comercio, pero no para comprar, sino para palear y buscar algún rastro del valioso mineral.
Todo comenzó porque la calle la abrieron para adelantar trabajos en el sistema de acueducto y alcantarillado del municipio, pero, al parecer alguien encontró oro, corrió el rumor y causó que en cuestión de minutos la calle Bolívar se convirtiera en una mina improvisada.
Según las autoridades, el estado de la calle en este momento aún es incierto, pues las personas siguen en su labor minera con la esperanza de encontrar y llevarse algo del oro que tienen justo bajo los locales comerciales.