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¿Cómo preparar un ritual de renovación para el Año Nuevo y limpiar las malas energías de su casa?

A medida que nos aproximamos al inicio del año nuevo, el Maestro Joao, más conocido como el vidente de los famosos, comparte un ritual de esperanza y renovación.

Ritual de ajo y vinagre en año nuevo
Ritual de ajo y vinagre en año nuevo, según vidente de famoso en Año Nuevo/ Foto: Bing creator

El Año Nuevo marca el inicio de un nuevo ciclo, una oportunidad para dejar atrás el pasado y recibir con esperanza y optimismo lo que está por venir. En este momento de transición, es común buscar maneras de renovar energías y crear un ambiente positivo en el hogar. Los rituales de eliminación de malas energías se presentan como una herramienta para despejar el camino hacia la prosperidad y el bienestar.

Con la llegada del nuevo año, el Maestro Joao, vidente de los famosos, comparte un ritual sencillo y accesible para dejar atrás las energías negativas del pasado y atraer la positividad en el año que viene.

El ritual utiliza elementos comunes y simbolismos que se remontan a la antigüedad. El vinagre, por ejemplo, se considera un potente repelente de las energías negativas. El ajo, por su parte, tiene propiedades protectoras y la canela, con su fragancia, aporta equilibrio y armonía.

El ritual comienza con la incorporación del vinagre, un potente repelente de las energías negativas. Se vierte cuidadosamente en un vaso asegurándose de que todo el líquido caiga. Luego, se añaden tres dientes de ajo, que no es necesario pelar, ya que sus propiedades protectoras se mantienen intactas. Finalmente, se incorpora la canela, que aporta su fragancia y su significado esotérico, para equilibrar la mezcla de manera armoniosa.

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El momento importante del ritual es la introducción de un cuchillo en el vaso que simboliza la ruptura con las energías negativas. El cuchillo se hunde en el líquido con firmeza, cortando los lazos que unen a la persona con la negatividad.

El vaso preparado se coloca en algún rincón de la casa, preferiblemente en una esquina. La ubicación exacta no es importante, pero si que el vaso esté en contacto con el suelo.

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Al cabo de tres días, el contenido del vaso se vierte en un río, un arroyo o cualquier otro lugar donde el agua corra libremente. Este acto simboliza la liberación de las energías negativas y el inicio de una nueva etapa de bienestar y optimismo.

Este ritual es una celebración de la esperanza y la renovación, una forma de dar la bienvenida al nuevo año con una actitud positiva.

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