Philipsen se corona en la primera etapa de la Vuelta a España y se viste con el mailot rojo
El belga Jasper Philipsen (Alpecin Deceuninck) es el primer líder de la 80 edición de la Vuelta a España al imponerse al esprint en la etapa inaugural.
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Puños apretados y una sonrisa de satisfacción. Así celebró el belga Jasper Philipsen al imponerse en el esprint de la primera etapa de la 80 edición de la Vuelta a España, una jornada de 186,7 kilómetros entre Turín-Reggia Di Venaria y Novara, que además le permitió estrenar el maillot rojo de líder.
El ciclista del Alpecin, de 27 años, ya sabe lo que significa vestirse con un jersey de líder, pues en el pasado Tour de Francia también se colocó el maillot amarillo tras imponerse en Lille. Esta vez cumplió los pronósticos en Italia con un tiempo de 4 horas, 9 minutos y 12 segundos, a una velocidad media de 45 km/h, dejando atrás al británico Ethan Vernon y al venezolano del Movistar, Orluis Aular, quien sorprendió al colarse en el podio frente a los velocistas más fuertes.
“Es un momento especial. Los compañeros me colocaron perfecto y pude rematar. Ya estrené el amarillo en el Tour, por lo que esta victoria la recordaré siempre”, comentó Philipsen en la meta.
El arranque de la Vuelta fue un verdadero festín para los hombres rápidos. Desde el kilómetro cero, en Turín, con el río Po de fondo y la figura de Fausto Coppi como referencia, se animaron las primeras fugas. El pelotón, que fue despedido por el príncipe Alberto de Mónaco, vio partir a seis ciclistas: Joel Nicolau, Hugo de la Calle, Reinderink, Nico Vinokourov, Bouwman y Verre.
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— La Vuelta (@lavuelta) August 23, 2025
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El joven belga Verre se llevó el primer maillot de la montaña tras coronar La Serra, mientras que Reinderink pasó primero por el esprint intermedio. El último en resistir fue el español Hugo de la Calle, campeón nacional sub-23, quien aguantó en solitario hasta que el grupo lo alcanzó a 38 kilómetros de la meta.
La cacería fue organizada principalmente por el Lidl-Trek de Mads Pedersen y el Alpecin, escuadra de Philipsen, que tenía claro el botín en disputa: el primer maillot rojo de esta edición.
En los últimos diez kilómetros, la tensión se disparó. A más de 60 km/h, los equipos se disputaban cada centímetro de asfalto en medio de rotondas y maniobras arriesgadas. El Movistar intentó colocar a Aular en buena posición, mientras que el UAE y el Visma, con Vingegaard y el dúo Ayuso-Almeida, se limitaron a resguardar a sus líderes sin entrar en la pelea del esprint.
El trabajo de colocación del Alpecin resultó decisivo. En un cierre caótico, Philipsen volvió a mostrar su poderío como lo hiciera en el Tour: aceleró en el momento justo y no dejó opción a sus rivales. Con esta victoria suma ya 55 triunfos en su palmarés, 10 de ellos en el Tour y 4 en la Vuelta, de los cuales tres han llegado en esta temporada.
La fiesta para los velocistas podría ser breve. Este domingo la Vuelta vivirá su **primera llegada en alto**, con una etapa de 159,5 km entre Alba y Limone Piamonte. Aunque el terreno será mayormente llano, el desenlace se definirá en una subida de casi 10 km al 5,1 % de pendiente media, con tramos que alcanzan el 10 %. Una primera cita que pondrá a prueba a los favoritos de la general.