El ministro de Defensa, Carlos Holmes Trujillo, se refirió en Villavicencio al polémico tema del uso del glifosato como herramienta para erradicar cultivos de coca en el país.
El enemigo de los colombianos es el narcotráfico, no un herbicida, no es el glifosato.
El funcionario recalcó que en 2013, cuando se adelantaba el proceso de paz entre el Gobierno de Colombia y las Farc, “se tomaron decisiones equivocadas”, razón por la que aumentó la siembra de cultivos ilícitos en varias zonas del país.
El pronunciamiento se dio en medio de una rueda de prensa en la que el ministro y las Fuerzas Militares entregaban detalles de un consejo extraordinario de seguridad citado por el asesinato de un funcionario de la Corporación Ambiental del Meta – Cormacarena en hechos registrados en el municipio de La Macarena.
Precisamente, una de las hipótesis tendría que ver con organizaciones criminales y disidencias de las Farc como responsables de este homicidio, al parecer cometido en retaliación por las operaciones que se vienen adelantando en este sector del país en contra de la deforestación.