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La plenaria del Senado de la República aprobó en último debate el proyecto de ley que actualiza el Estatuto Disciplinario de la Policía Nacional, estableciendo nuevas sanciones contra los miembros de la institución que cometan abusos en los procedimientos.
En medio de las críticas que ha recibido la institución por el exceso de fuerza en ciertos procedimientos, el senador José Luis Pérez, ponente de la iniciativa, explicó que se incluyen garantías al ejercicio de la manifestación pública, se eleva a falta gravísima esos abusos, lo cual implicará hasta sanción de destitución e inhabilidad.
Pérez también señaló que, acogiendo propuestas de sectores de oposición, se incluyó como faltas graves que un uniformado impida la grabación de los procedimientos o que manipule dispositivos para eliminar su contenido, además del ocultamiento de la identificación, entre otras conductas, entregando mayor efectividad y celeridad en el proceso disciplinario.
El ministro del Interior, Daniel Palacios, celebró el avance del proyecto, al que sólo le resta la conciliación, y dijo que este es un compromiso del Gobierno y la Policía para actualizar y modernizar sus procedimientos, con “cero permisividades con el exceso de fuerza”. El funcionario agregó que apoyan con vehemencia a la Policía Nacional, pero que también le exigen “los más altos estándares de cumplimiento”.
“Estamos viendo una Policía que, con los ojos abiertos, de la mano de la institucionalidad, está buscando actualizar su código disciplinario para que guarde el debido proceso, pero que quien irrespete el uniforme de la Patria, quien actúe fuera del mandato constitucional y legal, deba ser sancionado de manera ejemplar, diciendo de manera inequívoca que el Gobierno Nacional no tolera bajo ningún mecanismo el exceso de fuerza y ninguna extralimitación”, indicó el funcionario.
Desde la oposición destacaron algunos puntos aprobados, pero también ratificaron algunas críticas. El senador Antonio Sanguino, de Alianza Verde, manifestó que, si bien reconoce que fueron aprobados varios puntos de la ponencia alternativa, “no se acogieron recomendaciones de los organizamos con trabajo en Derechos Humanos y la CIDH hizo innumerables aportes que fueron descartados”.
El proyecto pasó a conciliación en las plenarias de Cámara y Senado y posteriormente irá a sanción presidencial.
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