De TikTok a volar drones con explosivos: la nueva trampa para reclutar niños
El reclutamiento de menores en Colombia se ha trasladado a las redes sociales. Grupos armados usan plataformas digitales para atraer jóvenes, mientras líderes comunitarios alertan sobre nuevas formas de adiestramiento bélico.
El reclutamiento forzado de niños, niñas, adolescentes y jóvenes (NNAJ) en Colombia está migrando aceleradamente hacia los entornos digitales. Así lo advierte una reciente investigación de la Fundación Vivamos Humanos, que documenta cómo plataformas como TikTok, Facebook, Telegram, Instagram e incluso videojuegos están siendo utilizadas por grupos armados ilegales para captar, manipular y seducir a menores de edad.
El estudio identificó 40 casos directos y rastreó 70 cuentas que tendrían presunta relación con estructuras como el Estado Mayor Central (EMC), el ELN, el Clan del Golfo (EGC), las disidencias del Bloque Occidental (EMBF) y las Autodefensas Conquistadoras de la Sierra Nevada (ACSN). Algunas de estas publicaciones superan las 200.000 visualizaciones y utilizan estrategias de propaganda digital que romantizan la vida combatiente, exaltan el uso de armas y prometen falsas oportunidades de empleo, estatus y pertenencia.
Las zonas donde se concentra este fenómeno coinciden con los territorios más golpeados históricamente por el conflicto armado: Cauca, Nariño, Putumayo, Catatumbo y Magdalena Medio. Desde esas regiones, líderes sociales alertan que el reclutamiento ha alcanzado niveles inéditos de sofisticación.
Reclutamiento menores de edad
Foto: AFP
Yiner Quiguantar, líder juvenil del Cauca, denunció que “los menores reclutados están siendo entrenados en el manejo de drones que luego son usados para atacar a las mismas comunidades”. Su testimonio refleja la manera en que los grupos armados están instrumentalizando a los jóvenes en una guerra cada vez más tecnológica.
La Fundación Vivamos Humanos advierte que este tipo de reclutamiento digital normaliza la violencia, deteriora el tejido social y perpetúa el conflicto armado. Por eso, hace un llamado urgente a fortalecer las rutas de prevención en entornos digitales, la protección comunitaria y el control de contenidos que promuevan o faciliten la vinculación de menores.
La organización concluye que proteger la infancia en el mundo digital es, hoy más que nunca, un compromiso fundamental para avanzar hacia la paz.