
El jefe de gobernanza de la Alcaldía de Bucaramanga , Richard Caicedo, sostuvo una reunión con directivos del sindicato del Acueducto Metropolitano de Bucaramanga (AMB) para discutir la preocupación de los trabajadores sobre la reposición de medidores de agua en Bucaramanga, Girón y Floridablanca.
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Durante el encuentro, los líderes sindicales manifestaron su rechazo a que la instalación de los nuevos medidores sea realizada por una empresa contratista externa, argumentando que esta decisión incrementaría los costos del proyecto.
Según Oscar Ovidio Díaz Ramírez, asesor sindical de Sintraendes, y Oscar Estupiñán, presidente del sindicato, “la reposición de 100.000 medidores a través de un contratista podría costar cerca de $5.000 millones, mientras que, si se ejecuta con personal de planta del acueducto y la contratación de 10 operarios adicionales, el costo se reduciría a aproximadamente $2.000 millones, incluyendo todas las prestaciones sociales y legales”.
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El sindicato aclaró que no se opone al cambio de medidores, pues reconoce que muchos han superado su vida útil de 20 años. Sin embargo, insisten en que el proceso debe ser realizado por empleados directos del AMB, para evitar la tercerización de funciones misionales de la entidad.
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El jefe de gobernanza Richard Caicedo, reiteró que “el alcalde Jaime Andrés Beltrán no ha intervenido en la compra ni en la instalación de los medidores, ya que estas decisiones son competencia exclusiva de la Gerencia General del AMB”, señaló.
A su vez dijo que, “la administración municipal se mantendrá como garante del diálogo entre el sindicato y la gerencia del acueducto, respetando la autonomía administrativa y financiera de la empresa”.
Por ahora, el sindicato espera que la gerencia del AMB atienda sus peticiones y defina el mecanismo de instalación de los medidores, garantizando la eficiencia en la ejecución del proyecto.