La designada ministra de Salud, Carolina Corcho , piso nuevamente sobre la mesa la posibilidad de gravar con nuevos impuestos a las bebidas azucaradas, un tema espinoso que ha sido objeto de debate en varias oportunidades en el Congreso de la República, pero que no ha logrado el respaldo suficiente para ser aprobado.
Durante el retiro programático de los integrantes del Pacto Histórico en Medellín, Corcho se refirió a las distintas fuentes de financiación para su sector, entre ellos el recaudo que se podría conseguir, incluyendo en la reforma tributaria, ese cobro a las bebidas ultraprocesadas.
“Los impuestos a las bebidas azucaradas, además de tener impactos favorables en la salud pública, porque desincentiva el consumo de gaseosas y azúcares y reduce las enfermedades crónicas no transmisibles, podría ser una opción de recaudo para el sistema de salud colombiano”, explicó.
La funcionaria también explicó que en el primer año no se tramitará la reforma a la salud, pues la prioridad será abonar el camino con la tributaria, donde se conseguirían recursos para sacar adelante las transformaciones que serán propuestas en esa materia, inicialmente en el segundo año de gobierno.
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La senadora Martha Peralta , vocera del Pacto, explicó que “ese proyecto borrador está bastante avanzando, pero no se puede hacer a la ligera y hay que seguir construyéndolo. También depende de artículos de la reforma tributaria con algunos impuestos que irían directo a fortalecer el sistema de salud”.
Corcho insistió en que se ha encontrado “un sistema de salud en quiebra” pues, según reveló, a las clínicas privadas les deben $12.7 billones y a las IPS $10.1 billones. Finalmente, la ministra explicó que en el país se presentan diariamente 250 tutelas por negación de servicios de salud.
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