Tropas de la Brigada 13 del Ejército en conjunto con la Fiscalía capturaron en las últimas horas a dos peligrosos delincuentes, integrantes del Tren de Aragua, responsables de múltiples extorsiones y atentados con bombas incendiarias a comerciantes de las localidades de Bosa y Kennedy, sur de Bogotá.De acuerdo con las autoridades, estos criminales fueron capturados en el municipio de Soacha, Cundinamarca, en sus sitios de residencia. Desde allí, dirigían y ordenaban las extorsiones contra los comerciantes del sur de la capital del país.A los hombres se les incautaron dos armas largas, dos armas cortas, dos armas artesanales, dos bombas incendiarias, siete proveedores, 121 cartuchos de varios calibres, 120 cigarrillos de cannabis y 4 celulares, que al parecer eran utilizados para amenazar y atentar contra sus víctimas, así como para el tráfico de estupefacientes en la ciudad.“De esta manera, la Décima Tercera Brigada, unidad orgánica de la Quinta División del Ejército Nacional, golpea contundentemente las finanzas ilegales de las estructuras criminales que delinquen en Bogotá y Cundinamarca”, indicó el general Rodolfo Morales Franco, comandante de la Brigada 13 del Ejército.
Un juez envió a la cárcel a Erick Miguel Leones Castillo y Mauricio Beltrán Ariza, dos peligrosos asesinos, integrantes de Los Satanás, implicados en el homicidio de un transportador informal que se negó a pagar extorsiones, el pasado 12 de enero, en el barrio San Antonio de la localidad de Bosa, suroccidente de Bogotá.El cuerpo de la víctima fue encontrado en el vehículo que conducía, con un letrero en el que ‘Satanás’ se atribuía el asesinato y dirigía un mensaje amenazante a otros transportadores para presionarlos a cumplir con las cuotas de dinero que les exigían para ejercer la actividad económica en el sector.Por esto, una fiscal de la Seccional Bogotá les imputó los delitos de homicidio agravado; concierto para delinquir con fines de extorsión; tentativa de extorsión; fabricación, tráfico y porte de armas, municiones de uso restringido, de uso privativo de las Fuerzas Armadas o explosivos; y tráfico, porte o tenencia de armas de fuego, accesorios, partes o municiones, cargos que no fueron aceptados.Los asesinos fueron capturados por el Gaula en las localidades de Ciudad Bolívar y Usme y allí les fueron incautadas una motocicleta que habría sido utilizada para cometer el asesinato, un arma de fuego, una granada y panfletos alusivos a Los Satanás.
Este viernes, 31 de enero, la Policía Metropolitana de Bogotá alertó sobre una presunta amenaza de artefacto explosivo en Bosa, sur de Bogotá. Reportaron que la zona fue acordonada y se estaba verificando el objeto que allí fue abandonado.Según indicaron, la alerta fue exactamente en la carrera 81 con calle 71ª, en el barrio Humberto Valencia.Un grupo de antiexplosivos de la misma Policía Metropolitana de Bogotá adelantó las labores de inspección y verificación del elemento que fue arrojado en vía pública en esta localidad.Luego del análisis, a través de X descartaron algún tipo de explosivo en el lugar.“Ante la situación registrada en el barrio Humberto Valencia de Bosa, sobre un elemento simulado, informamos a la ciudadanía que luego de la verificación por parte de los técnicos, se descarta explosivos”, escribieron.Incendio en BogotáPor otro lado, en la tarde de este viernes se registró un grave incendio forestal en los cerros orientales de la ciudad, a la altura de la carrera séptima con calle 170.Los bomberos de las estaciones Centro Histórico, Caobos, Central y Chapinero acudieron al lugar para atender la emergencia, controlar las llamas y evitar su propagación.Cabe recordar que, según el Cuerpo Oficial de Bomberos de Bogotá, en este mismo punto se registró otro incendio forestal el pasado 24 de enero, lo que genera alerta sobre la recurrente afectación ambiental en esta zona de la ciudad.
En las primeras horas de la madrugada, autoridades de la localidad de Bosa, en el sur de Bogotá, lograron capturar a dos individuos que simulaban ser agentes de policía para cometer robos. Los delincuentes, quienes portaban identificaciones falsas, interceptaban a sus víctimas bajo el pretexto de realizar operativos relámpagos, aprovechando la situación para despojarlos de sus pertenencias. Sin embargo, esta vez su plan fue frustrado gracias a la rápida acción de la comunidad y la policía.El teniente coronel Óscar Chauta, comandante de la policía en Bosa, detalló que los capturados intentaron robar una motocicleta en un parqueadero público. Alertados por vecinos del sector, los uniformados lograron interceptarlos y aprehenderlos en flagrancia. Uno de los detenidos tiene antecedentes judiciales por receptación y lesiones personales.Este operativo se enmarca dentro de las acciones de seguridad implementadas en la capital colombiana para combatir el delito y garantizar la tranquilidad de los ciudadanos.Incautan drogas camufladas en brownies en CundinamarcaEn otro hecho relevante, en Cundinamarca, las autoridades desmantelaron una red delictiva que distribuía drogas mezcladas en productos de panadería, como brownies y tortas. Durante un operativo conjunto, se logró la captura de nueve personas y la notificación a dos más que ya se encontraban recluidas en centros penitenciarios. Además, se incautó marihuana y un dispositivo móvil utilizado para coordinar la venta y distribución de estas sustancias.El modus operandi de este grupo consistía en el expendio a domicilio, utilizando espacios públicos como el sector conocido como "El Hueco", la plaza de mercado y el parque principal para sus actividades ilícitas. Las autoridades continúan investigando para desarticular por completo esta red.Operativo humanitario en SoachaMientras tanto, en el municipio de Soacha, Cundinamarca, se llevó a cabo un operativo de carácter humanitario durante la noche. Voluntarios y autoridades distribuyeron bebidas calientes y alimentos a personas que trabajan en horarios nocturnos, así como a habitantes de la calle. Esta iniciativa busca brindar apoyo a quienes enfrentan condiciones de vulnerabilidad, especialmente durante las frías noches de la región.Estos hechos reflejan los esfuerzos de las autoridades por combatir el delito y, al mismo tiempo, fortalecer el tejido social mediante acciones que promueven la solidaridad y el bienestar comunitario.
En la tarde de este jueves, 23 de enero, se presentó una emergencia por una falla en un ascensor en el sur de Bogotá.De acuerdo con la información preliminar, dos personas resultaron heridas tras la caída de un ascensor en la carrera 81g con calle 73 s sur, al sur de Bogotá. Blu Radio conoció que este ascensor se habría caído desde un segundo piso, cuando las personas que encontraban en su interior.Ante esta situación de emergencia, los bomberos de la Estación Bosa acudieron al lugar para ayudar en las labores de rescate y atender a los lesionados.La Secretaría de Salud de Bogotá también fue informada de lo sucedido, por lo que ambulancias acudieron al lugar para realizar el respectivos traslado de los heridos a centros asistenciales.Las autoridades también iniciaron las labores de investigación para determinar qué sucedió en el lugar para que este ascensor presentara esta falla y provocara las lesiones de estas personas.Se espera conocer el dictamen oficial del estado de salud de las personas que resultaron lesionadas en este incidente.
Con una inversión cercana a los 240 mil millones de pesos, la Alcaldía de Bogotá anunció que unos 5.500 estudiantes fueron beneficiados de la segunda convocatoria del programa Jóvenes a la E. La iniciativa, cuyo listado se revelará en enero de 2025, otorga becas y apoyos económicos a aquellas personas que sean parte de ella.Este programa es el más grande del país en acceso a la educación superior, y seleccionó a más de 5.000 jóvenes para cursar estudios universitarios con becas completas y apoyos de sostenimiento.De los beneficiarios, 4.584 estudiantes recibirán becas en universidades privadas, con una inversión cercana a los 240 mil millones de pesos. Además, 900 jóvenes estudiarán en universidades oficiales, cuyos resultados se publicarán en enero de 2025, según informó el alcalde Mayor de Bogotá, Carlos Fernando Galán.“La administración distrital busca generar oportunidades para transformar la vida de los jóvenes y sus familias. Estos más de 5.000 futuros profesionales contribuirán al desarrollo de nuestra ciudad con educación de alta calidad”, destacó Galán.Jóvenes a la E ya cuenta con cerca de 29 mil estudiantes matriculados, a quienes se les garantiza una beca completa y apoyos económicos para reducir la deserción. Durante esta administración, se otorgarán un total de 32 mil becas, con una inversión programada de 1,7 billones de pesos.Según el director de Atenea, Víctor Saavedra, el programa también tiene un enfoque diferencial: el 10 % de los beneficiarios son víctimas del conflicto armado y el 4 % pertenece a comunidades étnicas. Además, el 80 % de los seleccionados está accediendo a un nivel educativo superior al de sus familiares.¿Cuál es la localidad con más beneficiados de Jóvenes a la E?Las localidades con mayor número de beneficiarios fueron Ciudad Bolívar (744), Bosa (614) y Suba (516). En cuanto a áreas de estudio, un 36 % de los jóvenes seleccionados se inclinó por programas relacionados con tecnologías de la información y comunicación, como Ingeniería de Sistemas e Ingeniería de Software.Por primera vez, el municipio de Soacha participó en Jóvenes a la E gracias a una alianza con la Región Metropolitana Bogotá-Cundinamarca. Un total de 241 jóvenes de esta región recibieron becas para programas enfocados en logística y agronegocios, con un 93 % de los beneficiarios pertenecientes a poblaciones vulnerables.¿Qué es jóvenes a la E?Es un programa que busca garantizar el acceso a la educación posmedia (educación superior y formación para el trabajo) para jóvenes de Bogotá y Soacha. Está diseñado para eliminar las barreras económicas que dificultan el acceso a la educación superior, proporcionando:Financiación total de la matrícula académica: este beneficio cubre la totalidad de los costos de matrícula en instituciones de educación superior acreditadas.Apoyo económico de sostenimiento: los estudiantes reciben un monto para cubrir gastos básicos durante su formación.Pasantías sociales: como parte del compromiso con el programa, los beneficiarios deben realizar actividades de impacto social en Bogotá o Soacha.
Un total de 40 familias han sufrido las consecuencias de un grave incendio ocurrido el pasado sábado en Bosa, Bogotá, en el Día de Velitas. Este desastre tuvo lugar en una bodega, en uno de los lotes a cielo abierto, donde se acumulaban plásticos y otros materiales inflamables.Según contó en Mañanas Blu Maritza Sotaquirá, una de las damnificadas, el fuego comenzó debido a la acumulación de canecas de pintura y otros plásticos sin ningún tipo de resguardo adecuado. La comunidad había advertido sobre esta situación anteriormente, pero poco se hizo para evitar esta tragedia, de acuerdo con su relato."Seguimos acá, no tenemos para dónde irnos, porque igual no podemos abandonar esto para poder seguir el proceso, para no darle oportunidad a los ladrones que desde la misma noche del incendio han querido robar, igual una casa también la robaron. Entonces, estamos acá en el piso, en colchonetas, pasando la noche", aseguró.Sobre los esfuerzos y las ayudas a los afectados, dijo que en un principio las entidades del Distrito se hicieron presentes y realizaron un censo de las familias allí. Después, según dijo, quitaron una carpa que se había instalado y ahora hay auxiliares que solo “echan un ojo”."Tomaron datos. Nos dijeron que debíamos adjuntar una documentación para que nos dieran un mes de arriendo porque, obviamente, las viviendas no quedaron habitables. Entonces, que nos iban a dar ese mes de arriendo si pasábamos los documentos y el funcionario, incluso ayer, me confirmó que eso solo se hace una vez por un mes. Aquí hay personal de la alcaldía, auxiliares, pero solo nos ayudan a echar un ojo, pero no más", indicó.Además, la situación ha sido especialmente crítica para los niños. Maritza comentó que tuvieron que evacuar a los niños debido a “la toxicidad del humo que inhalaron”.Sobre el origen del incendio, las hipótesis apuntan a un posible uso de pólvora durante el Día de Velitas, aunque la falta de una bodega adecuada y las condiciones peligrosas de almacenamiento jugaron un papel importante.A medida que la comunidad exige atención inmediata y efectiva, los afectados continúan esperando que tanto el Gobierno distrital como el nacional respondan a sus necesidades. En ese sentido, agradeció a quienes han brindado ayuda en momentos tan difíciles, resaltando la importancia de la solidaridad en la adversidad.
En el barrio San Bernardino, localidad de Bosa, en Bogotá, más de 45 familias enfrentan un drama tras perderlo todo en un incendio ocurrido durante la noche de velitas el pasado sábado.Según los afectados, la respuesta de las autoridades ha sido insuficiente y la comunidad permanece en las calles, expuesta al frío y la incertidumbre.El incendio, que destruyó 34 viviendas, dejó a cientos de personas sin un techo. Edward Porras, reportero del "Ojo de la Noche" de Blu Radio, recorrió la zona y conversó con las víctimas, quienes denunciaron la limitada atención recibida por parte de la Alcaldía de Bogotá y la Alcaldía Local de Bosa.Denuncias de abandono"Nos encontramos en la calle, durmiendo. Escuchen ustedes mismos la denuncia que hacemos aquí en el sur de Bogotá", expresó uno de los afectados. "Esto no fue un incendio menor; fueron viviendas de más de 30, 35 años. Estamos en el tercer día y, como pueden ver, estamos solos".Las únicas ayudas recibidas hasta ahora, aseguran los residentes, han sido dos carpas y algunas colchonetas. Otra afectada añadió: "Dos carpas y se fueron. No trajeron nada más". En cuanto a los alimentos, precisaron que no provienen de las autoridades distritales, sino de vecinos solidarios de los barrios aledaños. Promesas sin cumplirAunque el alcalde local de Bosa visitó la zona y ofreció reubicaciones y subsidios de arriendo, las familias aseguran que esas promesas no se han materializado. "Nos han dicho que nos van a ayudar para los arriendos, pero no sabemos cuánto ni cuándo. Le pedimos al señor alcalde un baño, algo básico, y no nos han dado respuesta", afirmó otro residente.Las familias han improvisado refugios con lo poco que les quedó tras el incendio. Durante el día, almacenan alimentos donados en una de las viviendas aún en pie, mientras que en la noche organizan turnos de vigilancia ante la ausencia de seguridad oficial. "La policía estuvo hasta la medianoche, después somos nosotros mismos quienes hacemos guardia", mencionó un habitante. Por ahora, la comunidad sigue a la espera de una intervención más decidida por parte de las autoridades distritales y locales, mientras enfrentan las frías noches de Bogotá sin soluciones claras a la vista.
Durante la noche de celebración del Día de Velitas, se presentó un grave incendio en una bodega de reciclaje en el barrio Potreritos, en el sur de Bogotá, el cuerpo de bomberos se dirigió al lugar para controlar las llamas que fortuna no dejó ningún herido.Aunque no dejó víctimas mortales, los vecinos del barrio se despertaron con panorama desalentador, pues la conflagración acabó con varias estructuras del lugar. En videos difundidos se puede observar las afectaciones de las llamas que consumieron las estructuras del lugar.Cabe destacar que aún no se conocen las circunstancias precisas que ocasionaron esta situación. Se cree el incendio pudo haber sido ocasionado por un volador, pues en estas fechas decembrinas es artículo de pólvora muy utilizado en los hogares colombianos.No dejó víctimas mortales, pero sí 19 viviendas afectadas. Sin embargo, como lo dio a conocer al alcalde de la capital, Idiger y la Secretaría de Integración de Bogotá, se encuentran adelantando una valorización de los afectados para brindarles el apoyo necesario."Bomberos de las estaciones Bosa, Kennedy y Restrepo trabajan para controlar un incendio estructural en una bodega ubicada en Bosa. Los bomberos realizan labores de control con herramienta manual y ataque directo con agua. Hasta este momento no se reportan personas lesionadas", señaló el alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán.Por otro lado, a pesar de los esfuerzos realizados por las autoridades, los daños materiales ocasionados por la emergencia fueron significativos. Las llamas que consumieron la bodega de reciclaje, donde se originó el incendio, dejaron únicamente cenizas, mientras que el intenso calor provocó el colapso de los muros de algunas construcciones cercanas.Además, las casas cercanas al lugar del incendio sufrieron graves daños en su infraestructura, incluso varias habitaciones quedaron expuestas tras el colapso de múltiples paredes provocado por las llamas. Los habitantes afectados perdieron muebles, electrodomésticos y otros enseres personales.Para el control de las llamas, el sector contó con 7 estaciones, 15 vehículos y 48 bomberos, que lograron el control del incendio en un 100%. Donde realizaron ataque directo con agua y búsqueda de lesionados, sin víctimas. Además, recordaron a la población reportar cualquier emergencia a la línea 123, según indicaron los bomberos de Bogotá.
Los ciudadanos de Bogotá y Soacha contarán con una nueva entrada a la capital, que mejorará significativamente la movilidad entre ambos municipios.El acalde Galán visitó junto al director del IDU, Orlando Molano, visitaron estos terrenos donde se ubicará la nueva vía que conectará a Bogotá con el municipio, creando una nueva entrada a la ciudad. "Junto a la Gobernación de Cundinamarca y la Región Metropolitana, estamos trabajando en este proyecto que cambiará la vida de más de 200.000 personas que viven entre la Avenida Ciudad de Cali en Bosa y la Avenida Terreros en Soacha", explicó Galán durante una visita a la zona donde se ejecutará la obra.El proyecto contempla la construcción de un puente que conectará la Avenida Ciudad de Cali con Soacha. Este puente tendrá cuatro carriles, de los cuales se está evaluando cuántos serán para tráfico mixto y cuántos para TransMilenio, además de incluir una ciclorruta que mejorará la conectividad para los usuarios de bicicletas. "Es fundamental conectar el costado occidental de la ciclorruta con Soacha", afirmó el alcalde.Actualmente las miles de familias que viven en Ciudad Verde tienen que sufrir por la movilidad pues tienen solo dos opciones para salir: la Autopista Sur que está muy saturada porque es la principal vía entre Bogotá y Soacha; o una pequeña vía que se ubica en límites con Bosa, la cual no tiene la capacidad vehicular para alto tráfico.Con este proyecto es un esfuerzo estratégico por mejorar la movilidad en la región y abrir una nueva entrada a Bogotá. La obra permitirá que más de 200.000 personas provenientes de Soacha se conecten con Bogotá sin necesidad de utilizar la Autopista Sur. "La gente que viene por la Autopista Sur podrá tomar esta alternativa para entrar a la ciudad", señaló Galán.El objetivo es extender la Avenida Ciudad de Cali hasta la Calle 170, facilitando una conexión directa con Suba y abriendo así una nueva entrada al norte de Bogotá. "Este proyecto es clave para transformar la movilidad del sur y conectarlo con el occidente y noroccidente de la ciudad", concluyó Galán.La obra, que representa un avance significativo en la infraestructura de transporte de la región, será adjudicada en 2025 tras cumplir con todos los trámites necesarios.