Luego de la visita de funcionarios de la Superintendencia de Transporte a la empresa de transporte Precoltur, por el accidente donde murieron 17 personas, se conocieron otras fallas que las autoridades evidenciaron tenía el bus que venía desde Tolú, Sucre, hacia Bello, Antioquia, pero que se vio interrumpido por la caída a un abismo en Remedios.
Según indicó el superintendente de Transporte Alfredo Piñeres en Noticias Caracol, quien en un primer momento advirtió que el bus que transportó la excursión del Liceo Antioqueño no cumplió ni el 20 % del listado de los elementos que se revisan en una tecnicomecánica y por eso el CDA se le fue suspendida su operación por seis meses, otro elemento es que este vehículo no contaba con cinturones de seguridad en las sillas, tampoco salidas de emergencia en las ventanas y teniendo capacidad para 40 personas, allí viajaban 39.
"Ese bus no tenía cinturones en las sillas, no tenía salida de emergencia en las ventanas, no cumplía con los estándares que debe cumplir un vehículo de estos para prestar el servicio. Luego, con respecto a la empresa, nos dimos cuenta que ese bus ya había tenido siniestros en años anteriores, tuvo en el 2021 uno con heridos, tuvo uno en el 2023 también con heridos.
Hasta ahora la investigación de las autoridades de transporte señala que con las fallas en frenos, suspensión y llantas lisas el vehículo no debió superar la inspección, en especial porque no habían pasado ni cuatro meses desde la revisión.
El superintendente también explicó que por el largo trayecto que iba a recorrer el bus desde Tolú, la empresa debía designar un segundo conductor para que lo relevara en el camino, pues implicaba más de 8 horas de recorrido que es lo recomendado y se estima que el fallecido chofer estuvo al volante entre 14 y 15 horas.
Piñeres concluyó diciendo que el GPS del bus indica que “iba excediendo la velocidad” instantes antes del grave accidente, lo que limita la capacidad de maniobra del conductor y genera impactos mayores en un escenario de siniestro vial.