Dolor y rechazo ha causado en Santander la muerte de un caballo durante la cabalgata de las ferias y fiestas del municipio de San Gil. En videos difundidos por ciudadanos se observa el momento en que el animal colapsa y comienza a sangrar por la boca y la nariz, mientras continúa el recorrido entre la multitud.
Según testigos, el caballo presentaba signos evidentes de agotamiento y enfermedad, pero sus dueños no atendieron la emergencia y siguieron participando en el evento. En medio de la cabalgata también se reportaron riñas y consumo de licor.
El hecho provocó indignación entre los habitantes y defensores de animales, quienes cuestionan que este tipo de actividades sigan permitiéndose en el departamento.
El diputado de Santander, Danovis Lozano, pidió que se aplique la Ley Ángel, que castiga el maltrato animal, y que las autoridades competentes investiguen tanto a los responsables como a la administración municipal.
“Hacemos un llamado urgente a la Fiscalía General de la Nación para dar con los responsables de esta muerte. No puede quedar en la impunidad. Lo advertimos desde hace mucho tiempo, las cabalgatas generan maltrato animal en todos los municipios. Pedimos también a la Procuraduría que investigue al alcalde de San Gil por permitir este tipo de actos”, señaló el diputado.
De acuerdo con información preliminar, la cabalgata fue organizada por un particular en el marco de las festividades locales. Hasta el momento, la Alcaldía de San Gil no se ha pronunciado oficialmente sobre lo ocurrido.
Este caso se suma a la muerte de otro caballo registrado en el municipio de Sabana de Torres Santander el pasado 16 de agosto, en medio de las ferias y fiestas, y un caballo llamado Rayito quien fue reanimado el 17 de agosto en el municipio de Villanueva, en medio de un colapso en plena cabalgata; lo que reaviva el debate sobre la necesidad de revisar y limitar este tipo de eventos tradicionales que, según ambientalistas, “se han convertido en escenarios de maltrato y descontrol”.