Las autoridades del área metropolitana de Bucaramanga reportaron que más de 150 vehículos fueron inmovilizados durante la noche de Halloween, en medio de las caravanas de motociclistas que se tomaron las principales vías entre Bucaramanga y Floridablanca, generando caos y poniendo en riesgo la vida de los conductores.
Según el secretario del Interior de Bucaramanga, Reynaldo Rojas, los operativos permitieron reducir en un 70 % los casos de desórdenes frente a años anteriores. “Si bien hubo algunas afectaciones, como el caso de un conductor al que varios motociclistas intentaron agredir luego de romperle el vidrio del carro, con la Unidad de Mando Unificado se evitó que se presentaran alteraciones graves del orden público, gracias al trabajo articulado con la Policía y la Dirección de Tránsito”, indicó el funcionario.
Por su parte, Jahir Castellanos Prada, director de Tránsito y Transporte de Floridablanca, indicó que muchos de los motociclistas detenidos incumplían las normas básicas de seguridad vial.
“En los operativos logramos evidenciar que los jóvenes no hacían uso del casco de seguridad y varios estaban manejando bajo los efectos del alcohol o tomando mientras conducían”, señaló el funcionario.
Durante los controles, la Policía Metropolitana de Bucaramanga capturó a dos hombres, conocidos con los alias de ‘El Cura’ y ‘El Abuelo’, quienes serían señalados de liderar las caravanas ilegales de motociclistas en la ciudad.
Las autoridades también confirmaron que más de 3.500 uniformados, entre Policía, Ejército, Dirección de tránsito Y Grupo antidisturbios UNDMO, participaron en el dispositivo de seguridad desplegado en los cuatro municipios del área metropolitana.
En varios puntos, especialmente sobre la autopista entre Floridablanca y Bucaramanga, se registraron momentos de tensión por los motociclistas que atravesaban la vía a gran velocidad y realizaban maniobras peligrosas, arriesgando sus vidas y las de otros conductores.
Pese a estos incidentes, las autoridades destacaron el comportamiento general positivo de la ciudadanía durante la noche de Halloween en comparación con años anteriores, cuando se registraban mayores afectaciones al orden público.