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En la tarde de este lunes murió en Floridablanca, Santander, monseñor Nel Beltrán, obispo emérito de Sincelejo y figura clave en los esfuerzos por la paz en Colombia.
Nacido el 24 de diciembre de 1940 en San Andrés, Santander, monseñor Beltrán fue diagnosticado hace varios años con cáncer de próstata, enfermedad que, con el tiempo, hizo metástasis. También padecía Alzheimer, condición que deterioró notablemente su memoria y capacidades cognitivas.
En las manos del Buen Pastor. 🕊️
— Diócesis de Sincelejo (@diocesissjo) August 12, 2025
Hacia el mediodía de hoy, en la ciudad de Bucaramanga, partió a la Casa del Padre Monseñor Nel Hedye Beltrán Santamaría, Obispo Emérito de la Diócesis de Sincelejo. @episcopadocol
Más aquí: https://t.co/moqCybrVTl pic.twitter.com/ZV3IAIJdbZ
La Diócesis de Sincelejo lamentó profundamente el fallecimiento de monseñor Nel Beltrán.
"Pastor ejemplar, querido y respetado por la Armada Nacional y los Infantes de Marina. Su voz fue un faro de esperanza y reconciliación para comunidades profundamente afectadas por la violencia en El Salado, Chengue, Macayepos, San Onofre, Mampuján y en toda la región de los Montes de María", dice un trino de la Diócesis de Sincelejo.
Su incansable compromiso con la paz, su cercanía con los más vulnerables y su firme testimonio cristiano lo convirtieron en mucho más que un líder religioso, fue un verdadero mensajero de paz cuya obra trascendió fronteras y dejó una huella imborrable en el corazón del pueblo colombiano.
Falleció en Floridablanca monseñor Nel Beltrán, obispo emérito de Barrancabermeja e impulsor de la paz en el Magdalena Medio. El miércoles será ofrecida una eucaristía en la catedral de la Sagrada Familia, presidida por el Arzobispo Monseñor Ismael Rueda. #VocesySonidos pic.twitter.com/8GgaFoWQdG
— Blu Santanderes (@BLUSantanderes) August 12, 2025
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A lo largo de su vida pastoral se destacó por su papel como mediador en el conflicto armado. En los años 80, durante el gobierno de Belisario Betancur, participó como emisario de la iglesia en los primeros acercamientos con grupos guerrilleros.
En 1992, formó parte de los diálogos de Tlaxcala (México), que reunieron al gobierno de César Gaviria y a la Coordinadora Guerrillera Simón Bolívar, integrada por las FARC, el ELN y el EPL.
Más adelante, en 1998, bajo la administración de Andrés Pastrana, impulsó nuevas iniciativas de paz con las Farc y el ELN, insistiendo siempre en que estos procesos debían estar liderados por personas con verdadero compromiso ético y social. También promovió espacios de diálogo en la región de los Montes de María con sectores del ELN.
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En la Iglesia Católica Beltrán ocupó cargos de gran relevancia. Fue vicario general de la Diócesis de Barrancabermeja, director del Secretariado Nacional de Pastoral Social de la Conferencia Episcopal y obispo de Sincelejo entre 1992 y 2014, año en que el papa Francisco aceptó su renuncia.
Su legado lo convirtió en un referente moral y espiritual, especialmente para las comunidades del Magdalena Medio, profundamente afectadas por la violencia.
Una eucaristía en su memoria se celebrará este miércoles en la Catedral de la Sagrada Familia de Bucaramanga, presidida por monseñor Ismael Rueda, arzobispo de la ciudad.